Название | Psicoterapia Integrativa EIS |
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Автор произведения | Roberto Opazo |
Жанр | Документальная литература |
Серия | |
Издательство | Документальная литература |
Год выпуска | 0 |
isbn | 9789569946646 |
Al igual que las creencias irracionales, en la secuencia a-b-c las cogniciones desadaptativas de Beck se sitúan en b; y también contribuyen – estable y sistemáticamente – a distorsionar el procesamiento de la información. Los eventos de la vida, entonces, pasan a ser interpretados a través de estas estructuras o lentes cognitivos. De este modo, las estructuras cognitivas disfuncionales presionan hacia formas particulares de codificar o de categorizar los datos; actúan rígidamente, de un modo absoluto, discriminativo y global, y conducen a la persona a malinterpretar una amplia gama de experiencias.
En su interacción con las experiencias de la vida, estas estructuras facilitan permanentemente la génesis de pensamientos automáticos generadores de estrés; o la génesis de errores cognitivos como una atención selectiva generadora de depresión. Por tanto, las estructuras cognitivas disfuncionales facilitan el despliegue de conductas desadaptativas.
El objetivo último de la terapia cognitiva de Beck es la reestructuración cognitiva. El fin es que el paciente logre cambiar su estilo de procesamiento de la información. Para ello utiliza estrategias tanto cognitivas como conductuales. Para Beck, cada desajuste psicológico tiene un contenido cognitivo específico; esto es conceptualizado como la hipótesis del contenido específico. Por ejemplo, en la base de la poca asertividad estarían estructuras cognitivas desadaptativas del tipo "para ser feliz, debo ser aceptado por toda la gente, todo el tiempo" o "quién nada hace, nada teme"; en la base de los sentimientos persecutorios, estarían estructuras del tipo "soy el centro de la atención de todo el mundo"; en la base de la depresión estarían estructuras del tipo "lo que más importa es no fracasar", o "soy el responsable de todos los fracasos". A su vez la personalidad histriónica "adhiere a la creencia central de que las personas están para servirme o para admirarme, lo cual puedo lograr a través de mis emociones y conductas" (Prochaska y Norcross 2007, p. 331).
Y, de cada estructura cognitiva, se desprendería un perfil cognitivo, es decir, un conjunto de pensamientos automáticos, un conjunto de errores cognitivos, etc., consistentes con la estructura cognitiva de trasfondo.
Para modificar un esquema, es decir, una estructura cognitiva de trasfondo, Beck y sus colaboradores han venido utilizando diversas estrategias: distinguir pensamientos de hechos, evaluar el grado de emoción y el grado de creencia ligado a cada pensamiento, categorizar la distorsión del pensamiento, realizar análisis costo-beneficio, examinar la evidencia, realizar ensayos conductuales ligados a costos y beneficios del pensamiento, utilizar la conducta para resolver el pensamiento negativo, etc. (Leahy, 2003).
Al igual que Ellis, Beck orienta su terapia a enfrentar los problemas actuales del paciente; y promueve la asignación de tareas intersesiones. En las tareas, se enfatiza especialmente el rol de los autorregistros y del registro de actividades diarias. También se enfatiza la necesidad de que el paciente vaya adquiriendo consciencia del rol perjudicial que desempeñan algunas estructuras cognitivas. Beck asume que la modificación de estructuras cognitivas no es tarea fácil.
A diferencia de Ellis, la terapia cognitiva pone un mayor énfasis en la investigación. Por otra parte, Beck hace menor hincapié en la confrontación, y confía menos en el desafío racional y filosófico. En suma, la terapia cognitiva es menos directiva y el paciente es comparativamente más libre… para ir alcanzando sus propias conclusiones.
En el contexto señalado, Beck acuña el término empiricismo colaborativo. Paciente y terapeuta se comprometen en procurar alcanzar ciertos objetivos terapéuticos, y en iniciar un proceso que involucra una misión compartida; una misión para recoger evidencia capaz de ratificar o de contradecir la forma en que el paciente procesa la información. Así, el estilo de la interacción es más bien socrático; al paciente no se le impone una forma de pensar, sino que va descubriendo y corroborando nuevos caminos. El proceso suele llevar también al paciente a responder algunas preguntas centrales: ¿Cuál es mi evidencia? ¿Hay otra forma de verlo? ¿Qué pasaría si lo temido sucede?
Se podría decir que Beck "democratizó" la aproximación cognitiva original de Ellis. Y, puesto que esta "democratización" no le resultó convincente a Ellis, este quedó con la idea que Beck simplemente le había "robado" sus ideas matrices.
La Terapia de los Esquemas Disfuncionales Tempranos de Jeffrey Young
Por otra parte, y utilizando como eje central el concepto de esquemas disfuncionales tempranos, Jeffrey Young (1990; 1999) ha venido desarrollando la terapia de esquemas. El concepto de esquema dice relación con estructura, perfil, encuadre. En el contexto de Young, un esquema es un patrón impuesto sobre la realidad o experiencia, para ayudar a que los individuos se la expliquen, para mediar la percepción, y para guiar sus respuestas. Más específicamente, los esquemas disfuncionales tempranos "son patrones emocionales y cognitivos autoderrotantes, que comienzan temprano en nuestro desarrollo y se repiten a través de la vida" (Young, Klosko y Weishaar, 2003, p. 7). Se trata de un patrón o tema amplio y pervasivo, compuesto de recuerdos, emociones, otras cogniciones y sensaciones corporales; se relacionan con la propia persona y con las interacciones de la persona con otros. Según Young, los esquemas disfuncionales tempranos están facilitados por la biología de la persona, especialmente por la amígdala; se desarrollan durante la infancia o adolescencia, y van siendo elaborados a través de la vida. La conducta de la persona no es parte del esquema mismo. Así, las conductas desadaptativas son dirigidas por los esquemas, pero no son parte de los esquemas.
Young et al., delimitan 18 esquemas; agrupados en 5 categorías amplias denominadas "dominios del esquema". Son categorías relacionadas con necesidades emocionales insatisfechas. El Recuadro 12 constituye una síntesis de los planteamientos de Young al respecto:
RECUADRO 12: DOMINIOS Y ESQUEMAS (ADAPTADO DE YOUNG, 2002)
Cada "dominio" abarca un área específica de influencia. Es así que el dominio iv, por ejemplo, involucra el que la persona pone un énfasis excesivo en satisfacer las necesidades de otros. De este modo, los pacientes que presentan el esquema "búsqueda de aprobación y de reconocimiento", valoran el lograr aprobación y reconocimiento de parte de la gente, por sobre el desarrollo de un sentido de sí mismo genuino y seguro. Su autoestima depende de las reacciones de los demás, más que de sus propias reacciones.
El abordaje clínico de la terapia de esquemas, involucra una fase de evaluación y educación y una fase de cambio. En la fase de evaluación y educación, el terapeuta ayuda al paciente a identificar sus esquemas y a comprender sus orígenes; el paciente es llevado a darse cuenta de cómo sus distorsiones cognitivas y sus respuestas de enfrentamiento sirven para perpetuar sus esquemas. Cognitivamente, el paciente tiende a no percibir y a no aceptar la información antiesquemática; las distorsiones cognitivas perpetúan el esquema al generar profecías autocumplidas, al enfatizar la información que confirma el esquema y al minimizar o descartar la información que lo contradice. Conductualmente, el paciente se compromete en situaciones y relaciones que gatillan y perpetúan el esquema. La evaluación clínica, entonces, es multifacética; incluye entrevista sobre la historia de vida, cuestionarios para evaluar esquemas, tareas de automonitoreo y ejercicios de imaginería que gatillan la activación de los esquemas. Se requiere que el paciente comprenda intelectualmente el operar de su esquema, y que experiencie emocionalmente esos procesos.
También aquí el modificar esquemas es considerado un proceso difícil y prolongado. En la fase de cambio, el terapeuta utiliza estrategias cognitivas, experienciales, conductuales e interpersonales. En la medida que los pacientes crean que sus esquemas son válidos, no serán capaces de cambiarlos. Este aspecto requiere de un abordaje