La salud comienza en tu boca. Yvonne Kort

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Название La salud comienza en tu boca
Автор произведения Yvonne Kort
Жанр Сделай Сам
Серия
Издательство Сделай Сам
Год выпуска 0
isbn 9788418531026



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y también la depresión. El riesgo de padecer este tipo de afecciones relacionadas con el estilo de vida es mayor cuando hay inflamaciones bucales, si bien no es la única relación entre la boca y la salud en general.

      Y a la inversa, también es posible que en tu boca sea visible que tienes una de esas enfermedades que ya he mencionado. Por ejemplo, las encías pueden sangrar más rápidamente y tener una apariencia algo extraña.

      La boca contiene los dientes (los elementos de la dentadura) y estos son, en parte, responsables de:

       La digestión. En la boca comienza la digestión. Su propósito es proporcionar la energía y los elementos de nutrición básicos que necesitamos. Durante la masticación y la trituración, la comida se descompone en partículas muy pequeñas. Además, se produce saliva que ayuda a formar una papilla a partir de los alimentos. Después, esta papilla se continúa digiriendo aún más, y así puede llegar a las células a través del torrente sanguíneo.

       La forma de tu rostro. Una mandíbula ancha le da una forma diferente a la cara que una mandíbula estrecha. Antiguamente nuestra mandíbula era lo suficientemente grande para albergar las muelas del juicio, pero actualmente estas nos causan cada vez más problemas ya que nuestra mandíbula se ha vuelto demasiado pequeña. El cuerpo se adapta muy lentamente a este cambio, por lo que el 35 % de la población ya no tiene muelas del juicio. Debido a la evolución, este porcentaje será cada vez mayor, y es muy posible que las generaciones futuras ya no las tengan.

       Junto con la lengua, la dentadura juega un papel muy especial en nuestra habla. Pregúntale alguna vez a alguien con dentadura postiza si quiere sacársela un momentito. ¿Puedes entender aún lo que está diciendo?

       Aparte de lo ya indicado, la boca tiene una labor esencial en el sistema inmunitario. Las membranas mucosas son nuestra primera línea de defensa y desempeñan una función de barrera para mantener las sustancias nocivas fuera del cuerpo. Además, la mucosa (las membranas mucosas) produce proteínas bacterianas para la defensa contra sustancias nocivas. En tu boca conviven bacterias beneficiosas y bacterias perjudiciales. Si existe un buen equilibrio, estas últimas no tienen ninguna posibilidad de ocasionar problemas. Por otro lado, las sustancias producidas por la mucosa se encargan también de que las especies patógenas no puedan adherirse a ella. De este modo no pueden ocasionar ningún daño.

       Una dentadura bien cuidada causa una buena impresión. Una primera impresión solo puede darse una vez, y los primeros diez segundos son decisivos para esto. Las investigaciones indican que primero prestamos atención a la sonrisa, y por supuesto, a los ojos.

      Curiosidades sobre la dentadura

       El color de tus dientes viene determinado por la dentina. Cuanto más amarilla sea, más amarilla se verá tu dentadura.

       El esmalte dental es el material más duro del cuerpo.

       En el Japón de la Edad Media, los dientes blancos no eran considerados bonitos.

       La nutrición contribuye de forma muy importante (quizás la más importante) a la salud de tu dentadura.

       Los niños sonríen, de promedio, unas cuatrocientas veces al día, mientras que los adultos solo unas quince veces.

      Weston A. Price (1870-1948) fue un dentista canadiense que se estableció en el estado de Ohio (Estados Unidos). Observó cómo las dentaduras de sus pacientes iban deteriorándose, y le llamó la atención que eso ocurría junto con una gran cantidad de otros problemas de salud. Por ejemplo, constató que, a menudo, algunas personas con una mala dentadura también padecían problemas psicológicos y otras enfermedades, algo que sucedía con menor frecuencia en personas con una dentadura sana. A principios del siglo XX, Price recorrió el mundo durante unos años para investigar la aparición de las ­enfermedades ligadas al estilo de vida. Entre 1931 y 1936 viajó, junto con su esposa, para descubrir los secretos de una buena salud, principalmente la salud dental. Encontró tribus y comunidades que lucían dentaduras radiantes y personas con estructuras óseas bien formadas. Eran estables emocionalmente y tenían buenas defensas, con una expresión facial poderosa. La atención de Price se concentró principalmente en los dientes, ya que consideraba que eran un buen indicador de la salud en general. Y centró su interés en la alimentación de estos grupos de población.

      Cada vez que investigaban a miembros de la misma tribu o raza, descubrieron que estas personas desarrollaban enfermedades tan pronto se relacionaban con la civilización moderna, lo que no sucedía con los que seguían alimentándose de forma tradicional. Con la dieta moderna no solo desarrollaron caries dental, sino que también les afectaron otros trastornos.

      «Dejemos de pretender que los cepillos y la pasta dental son más importantes que los cepillos y el betún para zapatos. Es la comida del supermercado lo que nos ha dado dientes de supermercado».

      Dr. Earnest Hooton, antropólogo,

       y Weston Price A, Nutrición y degeneración física.

      El doctor neerlandés Remko Kuipers, quien se está especializando en cardiología y farmacia, también ha realizado investigaciones sobre personas que ­todavía viven según las costumbres tradicionales. Obtuvo su doctorado en 2012 después de casi diez años de investigar los hábitos alimentarios de nuestros antepasados lejanos. Para ello, vivió unos dos años entre tribus africanas de cazadores-recolectores. De este modo, pudo observar de cerca lo que estas tribus comían y también sus costumbres, viendo el efecto que ello tenía en su salud.

      Descubrió que las personas que comían de forma primitiva, o sea, principalmente verdura, fruta, pescado, aves, carne, frutos secos y semillas, gozaban de una mejor salud y permanecían sanas hasta una edad más avanzada. Sin embargo, nuestra sociedad y nuestro estilo de vida nos abocan a enfrentarnos a enfermedades crónicas relacionadas con este estilo de vida desde una edad temprana.

      Cuando hablé con él en 2014, sentía curiosidad por saber qué había encontrado en las bocas de estas tribus africanas. Constató que quienes comían primitivamente tenían una mejor salud bucal que los que habían tenido contacto con los alimentos modernos. Desarrollaban menos caries y tenían menos inflamaciones de las encías (gingivitis).

      Dentro de la odontología, el profesor Van der Velden, entre otros, ha investigado mucho sobre la influencia de la nutrición en la salud bucal. En 2013 publicó un artículo sobre un estudio acerca de la influencia de una dieta sin productos refinados en la salud de las encías. Los productos refinados son básicamente aquellos que provienen de la industria, dado que todos estos alimentos han sido procesados. Pensemos en pan, pasta, galletas, tartas, patatas chips, dulces, etc.

      En este estudio, se investigó la condición de las encías en personas que seguían una dieta basada en la de los cazadores-recolectores, es decir, básicamente pescado, aves, carne de caza, carne magra, huevos, verduras, frutas y frutos secos. Se les pidió que no se lavaran los dientes por un periodo de cuatro semanas, y que siguieran con la dieta. Descubrieron que después de este tiempo, había aumentado la cantidad de placa dental, pero las encías sangraban menos e incluso había mejorado la situación de estas. Un ejemplo bien claro de la influencia de la nutrición en la salud bucal.

      Desgraciadamente, hablar del estilo de vida no es todavía algo común en la consulta del médico de familia o el dentista. La ciencia actual se enfoca principalmente en atacar la enfermedad por medio de medicamentos, lo que a veces es necesario para sobrevivir. Una cura de antibióticos es importante para combatir una inflamación aguda que pueda ser potencialmente mortal, pero también es aconsejable buscar la causa de esta inflamación. Si has encontrado la causa, es posible prevenir una infección futura. Mi visión es que no solo debemos atacar los síntomas, sino que es mucho