Название | Metraje encontrado |
---|---|
Автор произведения | Germán Carrasco |
Жанр | Языкознание |
Серия | |
Издательство | Языкознание |
Год выпуска | 0 |
isbn | 9789563651621 |
tomamos el transbordador a Porvenir,
nombre irónico para estas ventolerías
que ni dios estipulara y sin embargo
me viene lo mismo a la cabeza que anda a saber
qué pionero con cara de loco que bautizó este lugar
o que la croatada sedienta de oro.
Porvenir. Futuro. Fortuna.
Un corazón que de tan inflado
declara cara de raja:
AQUÍ PODRÍAMOS SER FELICES
en estos andurriales en el fin
de la galaxia. Por qué no.
Nos fuimos a recorrer esos confines
a ver si el corazón aguantaba o se rajaba.
CONSTELACIÓN DEL PERRO
La primera vez que escuché la palabra Canícula
fue a Juan Preciado. Algunos sostenían
que el descenso a Comala era una metáfora
del descenso al infierno, o algo así: mucho calor
y bajar y bajar como perros. A Pisagua.
APAMILCA
qué vienen a hacer aquí si aquí no anda ni dios
caseríos que se lleva el agua con metales pesados
quebradas que la minería acorrala.
solo un anciano con lentes ray ban:
estatua que mira al vacío
muerto o vivo no sabemos
pero en la madrugada parecen nipones
que cultivan alegres ajo y zanahorias
con una limosna de hilo de agua.
nos regalaron una trenza de ajo
e hicimos un pan fragantísimo en un fogón
con papel alusa y mantequilla.
CONTROL DE IDENTIDAD
Porvenir comienza a tomar forma
al igual que todo en este territorio:
como una avanzada policial en 1883,
un vulgar retén para que no se masacraran a balazos
los buscadores de migajas de oro.
No sólo Dawson y Pisagua. Todo aquí
por momentos parece un calabozo:
detención por look, criminalización de la pobreza
y controles de identidad. “¡Qué identidad
me van a controlar a mí
si no tengo ninguna o tengo cientos!”.
Eso vociferaba el poeta Aníbal Saratoga
y blandía desafiante un enorme jarro schopero
como si fuera el martillo
de la hoz no sé una cosa así
“¡Creen que trafico con mi identidad,
que la uso para que me estudien
cual un Moai los hijos de la remil!
¡Pues no soy pasto de papers y crítica cultural!”.
Saltaba espuma de su schop incluso
y sin distraernos de su arenga
nos pusimos en guardia para no recibir gotas.
“¡La única patria del poeta es su lengua!”
–continuaba–
“¡y los únicos palafitos son los dedos de la mujer que amo
que inspeccionan mi corazón con sospecha
como si fuese una casa pobre
en la que no quiere vivir,
una casa hedionda a soledad de macho triste,
una escultura fallida o un Buddha mal hecho
que ella inspecciona en sus dedos
en forma de la copa mundial de fútbol
una especie de profesora estricta
o anticuaria con cara de sospecha
ante una esfera de cristal barato
que va a romper con rabia contra el muro!”.
NOTAS
No hace falta ir a Pisagua ni a Tierra del Fuego,
allegado en muchas casas
y mochilero en su propia ciudad
su silbido de pobre perfora los sueños
de quienes duermen.
Una académica habla de nomadías
con 11 propiedades registradas a su nombre
incluyendo una en NY
y otra en Barrio Norte, Bs As.
Él habla de métrica y latín
¡Sabrá lo que es un clavo de 4”!
Es la opción por los pobres de este jesuita
educado en el Verbo Divino
que maneja una institución bancaria de la Iglesia
encargada de dar créditos blandos a los pobres
–un tetcho para tchile, esas cosas–
Y cómo no, escribe poesía.
VENTOLERÍAS
Pisagua. Porvenir. Quebrada de Camiña.
Cómo te gusta venir en pleno invierno
a los lugares más Marte del territorio
en donde los milicos relegaban a la gente.
¿Quieres llenar cada espacio del mundo,
como en The Cantos? ¿Bendecirlos?
¿Filmarlos? ¿Darles tarjeta verde, visa de existencia?
“No quiero llenar el mundo con mi presencia,
me busco y te busco en esos lugares. En la intemperie
se escucha mejor el propio rezo, aunque no sé rezar
y creo que cuando uno cree hacerlo
en realidad una se habla a sí misma”.
No hay que ocupar cada palabra existente. Para qué
¿De dónde nace esa idea colonialista y atropelladora?
Voracidad. Samsara. Mejor
siente el viento. Te lo traduzco:
NO HAY QUE OCUPAR PALABRASSS
HAY QUE OCUPAR PALASSSSSSSSSS
HAY QUE OCUPAR LUGARESSSSSSS
como Pisagua o Porvenir.
Tomas.