Nutrición para el fitness, la salud y el deporte. Dr. Oscar Incarbone

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Название Nutrición para el fitness, la salud y el deporte
Автор произведения Dr. Oscar Incarbone
Жанр Сделай Сам
Серия
Издательство Сделай Сам
Год выпуска 0
isbn 9789871822188



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      ¿Qué influye en un cambio de conducta?

      La motivación

      La motivación es un estado interno que activa, dirige y mantiene la conducta. Estar motivado significa ser movido a hacer algo.

      Es un estado de deseo de cambiar que puede variar de un momento a otro o de una situación a otra, influenciada por diferentes factores. La motivación es clave para el cambio y es un estado dinámico y fluctuante, es decir, se puede modificar y no siempre tiene la misma intensidad.

      Existen dos tipos de motivación:

      • Motivación extrínseca: está provocada desde fuera de la persona, depende del exterior, de alguien que genere esa motivación.

      • Motivación intrínseca: es aquella que se activa dentro del propio individuo, no depende del exterior. Genera altos márgenes de compromiso por parte del sujeto.

      Muchas veces es difícil o nos resistimos al cambio y hablamos de una “zona de confort”, un estado en el que una persona se siente segura y está totalmente a gusto. Se siente bien dentro de ella. Y entonces no ve la necesidad de cambiar.

      Existen mecanismos de defensa, los valores, las expectativas, las creencias de las personas, que a veces actúan como barrera para el cambio.

      Los hábitos alimentarios

      Finalmente llegamos a los hábitos alimentarios. Mencionamos anteriormente que forman parte de los factores determinantes de la salud y que pueden construirse de manera saludable o no.

      Para la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), los hábitos alimentarios son el conjunto de costumbres que condicionan la forma como los individuos o grupos preparan y consumen los alimentos, influidos por la disponibilidad, el nivel de educación y el acceso a los mismos.

      Para la OMS,

      • Una dieta saludable ayuda a protegernos de la malnutrición en todas sus formas, así como de las enfermedades no transmisibles, entre ellas la diabetes, las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares y el cáncer.

      • La alimentación evoluciona con el tiempo y en ella influyen muchos factores socioeconómicos que interactúan de manera compleja y determinan modelos dietarios personales.

      • Entre esos factores cabe mencionar los ingresos, los precios de los alimentos (que afectarán la disponibilidad y asequibilidad de alimentos saludables), las preferencias y creencias individuales, las tradiciones culturales y los factores geográficos y ambientales (incluido el cambio climático).

      • Los hábitos alimentarios sanos comienzan en los primeros años de vida; la lactancia materna favorece el crecimiento sano y mejora el desarrollo cognitivo; además, puede proporcionar beneficios a largo plazo, entre ellos la reducción del riesgo de sobrepeso, obesidad y de enfermedades no transmisibles en etapas posteriores de la vida.

      Existen grandes diferencias entre lo que se debería comer por necesidad biológica y lo que realmente se come. Esto forma parte también de lo que denominamos hábitos alimentarios.

      Tenemos que tener presente que la alimentación no solo cubre requerimientos biológicos de tipo nutricional, sino también, necesidades sociales, psicológicas y emocionales.

      Es el común denominador de todas las personas y forma parte de la cultura. La creación de hábitos alimentarios saludables desde la niñez es fundamental para mantener la salud y prevenir las enfermedades durante la vida.

      En su formación, influyen las primeras experiencias del ser humano en su familia, algunos factores económicos, geográficos, étnicos y religiosos, que hacen de la elección de los alimentos un proceso más que complejo.

      ¿Qué y quienes influyen?

      • Factores fisiológicos o propios del individuo.

      La edad, el sexo, la herencia genética, el estado psíquico, las alergias o intolerancias alimentarias, el apetito o las características del alimento.

      • Factores ambientales.

      La disponibilidad también interviene en la elección y el consumo. Esta disponibilidad es función del lugar donde uno vive, por ejemplo la estacionalidad que influye en el cultivo de la zona.

      • Factores económicos.

      Los recursos pueden hacer que se compre una comida u otra y que se modifique la alimentación. Hasta las condiciones de la vivienda afectan el tipo de comida consumida y su calidad. Influyen en el acceso y en la forma de conservar y preparar los alimentos.

      • Factores socioculturales.

      Las tradiciones a la hora de elegir y preparar los alimentos. La incorporación de nuevos alimentos. Como es la distribución horaria de las ingestas y el lugar donde se hacen, los conocimientos sobre alimentación y nutrición, la publicidad y el marketing.

      De esta manera, puede advertirse que el acto de comer es realmente complejo y que, con frecuencia, excede la necesidad biológica. Debemos siempre pensar en estos aspectos que influyen de manera positiva o negativa en la construcción de los hábitos alimentarios.

      ¿Cómo construir una alimentación saludable?

      La alimentación saludable es aquella que aporta todos los nutrientes esenciales y energía para que cada una de las personas pueda llevar adelante las actividades diarias y mantenerse saludable. Debe respetar gustos, preferencias y posibilidades de cada una de las personas.

      Para ello tiene que respetar las siguientes reglas:

      Las nuevas guías alimentarias para la población argentina, proponen una gráfica de la alimentación diaria con sus grupos de alimentos y frecuencia de consumo.

      Veamos lo que nos plantean:

      Vemos los 5 grupos de alimentos promovidos, con sus porciones recomendadas, en función a la proporción que ocupan en la gráfica.

      El grupo 6 es el de los alimentos de consumo opcional, aquellos no saludables que deseamos no sean incorporados con una frecuencia diaria. Estos aportan grasas, azucares y sal sin valor nutricional.

      Además la gráfica jerarquiza la hidratación con agua segura, menos consumo de sal en los alimentos para todas las personas y más actividad física durante el día, evitando comportamientos sedentarios.

      Principales mensajes

      1. Incorporar a diario alimentos de todos los grupos y realizar al menos 30 minutos de actividad física.

      2. Tomar a diario 8 vasos de agua segura.

      3. Consumir a diario 5 porciones de frutas y verduras en variedad de tipos y colores.

      4. Reducir el uso de sal y el consumo de alimentos con alto contenido de sodio.

      5. Limitar el consumo de bebidas azucaradas y de alimentos con elevado contenido de grasas, azúcar y sal.

      6. Consumir diariamente leche, yogur o queso, preferentemente descremados.

      7.