No esenciales. María Victoria Baratta

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Название No esenciales
Автор произведения María Victoria Baratta
Жанр Документальная литература
Серия
Издательство Документальная литература
Год выпуска 0
isbn 9789875997202



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      María Victoria Baratta

      No esenciales

      La infancia sacrificada

      Prólogo de Pola Oloixarac

Baratta, María VictoriaNo esenciales : la infancia sacrificada / María Victoria Baratta. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Libros del Zorzal, 2021.Libro digital, EPUBArchivo Digital: descarga y onlineISBN 978-987-599-720-21. Derecho a la Educación. 2. Estado y Educación. 3. Pandemias. I. Título.CDD 370.982

      Diseño de tapa: Osvaldo Gallese

      © 2021. Libros del Zorzal

      Buenos Aires, Argentina

      <www.delzorzal.com>

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      Queda prohibida la reproducción total o parcial de esta obra, por cualquier medio o procedimiento, sin la autorización previa de la editorial o de los titulares de los derechos.

      Impreso en Argentina / Printed in Argentina

      Hecho el depósito que marca la ley 11723

      Índice

       Agradecimientos | 5

       Puer sacer, o la doble destrucción de la educación | 8

       Introducción | 15

       Capítulo 1

       Emergencia educativa | 25

       Capítulo 2

       Padres Organizados | 40

       Capítulo 3

       Los costos invisibilizados | 70

       Capítulo 4

       En pandemia, sí se puede ir a la escuela | 96

       Capítulo 5

       La infancia, última | 130

       Reflexiones finales | 154

      Agradecimientos

      Gracias a Leopoldo Kulesz, por convocarme para hacer este libro, y a Pola Oloixarac, por su generosidad. Gracias a Federico Juega Sicardi y a Carolina Uribe por hacer magia de mis palabras.

      Gracias a las madres y padres fundadores de Padres Organizados, Florencia Gutman, María José Navajas, Quimey Lillo, Gustavo Magda y Gonzalo Garcés, por el trabajo conjunto y el camino recorrido. Gracias a las más de cien agrupaciones de padres y madres que se formaron a lo largo del país y a todos los que alzaron la voz por los derechos de sus hijos. Gracias a mi amiga Analía Correa, por ayudarnos.

      Gracias a los seguidores y usuarios de Twitter y a los periodistas que contribuyeron a amplificar el mensaje, y a todos los que, con valentía, firmaron la carta de Padres Organizados en septiembre, cuando el tema era casi tabú. Entre los firmantes, un recuerdo especial a la memoria de Federico Monjeau.

      Quiero agradecer a todos los especialistas de diversas disciplinas que me ayudaron de manera desinteresada a entender un fenómeno tan complejo. En primer lugar, muchas gracias a Alejandro Alice, Juan Schmukler y Federico Vasen, por su atenta lectura y comentarios a las primeras versiones de algunos capítulos. Gracias a Guadalupe Rojo, Juan Pablo Aguad y Florencia López Boo, por el asesoramiento sobre primera infancia. Gracias a quienes, directa o indirectamente, me ayudaron a recopilar evidencia o a pensar en todas las aristas del tema que se incluyen en este libro: Alex Milberg, Adolfo Rubinstein, Mónica Marquina, Cristian Duré, Federico Tiberti, Melisa Espagnol, Diego Hammerschlag, Rolando Rivera, Mauro Infantino, Gustavo Noriega, Cecilia Veleda, Roy Hora, Eduardo Wolovelsky, Martín Tetaz, Marcelo Vigo Andrade, Daniel Nieto, Carlos Bueno, Federico Sisti, Ismael Escribano, Adriana Amado, Martín E. de Simone, Iván Stambulsky, Luciano Román, Julia Pomares, Eduardo Sacheri, Lucas Llach, Valentín Muro, Rocío Vicario, Brenda Austin, Iván Ordóñez, María Soledad Planes, Albertina Piterbarg, Edgardo Zablotsky, Rosario Campos, Alejandro Virué, Ariel Diaco, Laura Romero, Eugenia Santana Goitia, Sofía Wiñazki, Luca Sartorio, Valentín Muro, Juan Manuel Palacio, Nicolás Lorenti, Juan Cruz Dall’Asta, Sebastián Katz. Seguramente, me estoy olvidando de mucha gente. Les pido disculpas y les agradezco a ustedes también.

      Gracias a quienes ofrecieron sus testimonios personales.

      Gracias a mis amigos de siempre, de hace unos años y de la pandemia.

      Gracias a mis tres maravillosas hermanas, a mi mamá —la mejor maestra jardinera del mundo—, a mi primera sobrina —que ya llega—, a mis cuñados. Gracias a mi papá, por todo lo que me enseñó.

      Gracias a Fede, mi hombre noble, por el amor diario, los placeres compartidos y el sostén en este año tan difícil. Gracias a la familia de Fede, por ser mi familia.

      No sé qué habré hecho tan bien en la vida como para merecerte, mi pequeña y fabulosa Amelia, pero gracias. Sos lo más importante para mí.

      Este libro está dedicado a todos los niños

      y adolescentes de la Argentina.

      Puer sacer, o la doble destrucción

      de la educación

      Pola Oloixarac

      El Estado Maternal

      Hace un año, el covid-19 hacía su debut viral en las vidas humanas. Mientras las ciudades cerraban y el remedio medieval de la cuarentena parecía el único antídoto, muchos intelectuales celebraron lo que veían como la derrota del orden neoliberal. Leían en el virus la capacidad de hacer “lo que no pudieron los hombres” (derrocar el sistema, en palabras de “Bifo” Berardi), dando un golpe “a la Kill Bill al capitalismo” (Žižek). Para muchos, había tronado “la hora del Estado”, como unos cien años antes Leopoldo Lugones había cantado, entusiasta, el arribo auspicioso de “la hora de la espada” ante la ruina de la democracia liberal.