capilla del siglo XI. Si desea descubrir más cosas, a pocos kilómetros de distancia, el valle de Ateni conduce a la iglesia de Ateni Sioni, enclavada en un sitio espléndido.
Día 6: dé un paso más en la aventura troglodita: piérdase por los monasterios del semi-desierto de David Gareja. Paisajes del centro asiático en la frontera con Azerbaiyán, frescos medievales en cuevas en medio de la estepa, increíbles complejos arquitectónicos, pastores a caballo: tendrá la impresión de encontrarse en el fin del mundo. Y estará en el punto más oriental del mundo cristiano. Para llegar allí pasará por la ciudad soviética de Rustavi, que surge en medio de la nada, y su impresionante avenida Central, de estilo estalinista.
Días 7 y 8: altas montañas del Cáucaso
Si el tiempo lo permite, podrá abalanzarse sobre las altas montañas del Cáucaso, que le reservan los paisajes más espectaculares de todo el territorio, guardando una noche para la ciudad de Stepantsminda (Kazbegi).
Día 7: tome la Carretera militar georgiana, única apertura natural a través del Gran Cáucaso, que a menudo ha sido infranqueable. Los árabes se adentraron por ella en el siglo VII y los rusos llegaron por aquí en el XIX. Se sumergirá en las montañas, donde descubrirá la belleza del lago de Jinvali y luego las del emplazamiento eclesiástico fortificado de Ananuri. Cruzando el puerto de la Cruz llegará, después de media jornada, a Stepantsminda (Kazbegi), sobre el río Térek, en la frontera con Rusia, a los pies del monte Kazbek, tercera cumbre del Cáucaso, donde Prometeo fue, al parecer, encadenado. Continuará caminando hasta la capilla de la Santísima Trinidad (Tsminda Sameba), cuya silueta se ha convertido en emblema del Cáucaso. Pruebe los khinkalis de Stepantsminda, pues se dice que son de los mejores, y disfrute de las tradiciones de los pueblos de la montaña alojándose en casa de alguno de sus habitantes.
Día 8: antes de regresar, anímese a adentrase en el salvaje valle del Sno, que conduce a la aislada provincia de Khevsureti y a sus míticas tradiciones ancestrales. El pueblo fortificado de Sno vale realmente la pena. Tendrá la impresión de haber retrocedido un siglo.
Días 9 y 10: Tiflis y Kajetia
Día 9: disfrute de nuevo de Tiflis y de su animada vida. Visite la monumental catedral de la Trinidad (Sameba), construida en 2004 y financiada por un empresario millonario en el centro de Avlabari, un barrio tradicionalmente armenio. También puede deambular por Saburtalo, un barrio moderno de universidades y hospitales. Además puede pasar una noche en la ópera, en el conservatorio, en un restaurante musical, o, si tiene suerte, ver un conjunto de danza y de música tradicional. Si aún tiene fuerzas para nuevas aventuras, diríjase a Kajetia, la cuna del vino georgiano.
Día 10: acérquese a Signaghi, un pequeño pueblo bellamente situado a los pies de las cumbres de Daguestán. Admire la cultura del vino y las tradiciones locales para luego dirigirse a Telavi, la capital de la región, donde se encuentra el seductor palacio del rey Irakli II, una mansión persa en miniatura. Al final le espera la catedral de Alaverdi, la más alta de las iglesias históricas georgianas, que se encuentra sola, en medio de la llanura frente a las montañas. Puede hacer esta excursión en dos días, durmiendo en Telavi, y visitar así el resto de las maravillas arquitectónicas de la región de Kajetia: la academia de Ikalto, los monasterios de Shuamta, las iglesias de Gremi y Gurjaani. Y sumergirse en el corazón del vino georgiano visitando una bodega o asistiendo a su elaboración en casa de cualquier habitante local.
Estancia larga: Georgia en 3 semanas
En la época adecuada, una ruta por Georgia debe contemplar:
Una estancia en la capital georgiana que incluya una visita a los principales lugares culturales de la región.
La exploración del eje de la meseta alta de Kartli hasta la llanura de Imericia, cuna de la civilización georgiana, rica en monasterios, iglesias, fortalezas y paisajes variados, que incluye los pueblos de Kutaisi y Gori.
El suroeste georgiano, en las montañas del Cáucaso Menor. Contraste sus impresiones visitando la costa ayariana del mar Negro, de clima subtropical, luego los áridos valles altos de Samtsje-Yavajeti, región a la que pertenece Ajaltsije (ciudad de origen de Charles Aznavour), con acentos armenios y turcos, donde se encuentra la ciudad troglodita de Vardzia. Finalmente descubrirá la región de Borjomi, con bosques de coníferas, y la ciudad balneario de Borjomi, cuyas fuentes de agua mineral eran conocidas en toda la antigua URSS por sus virtudes curativas, su parque natural y la estación alpina de Bakuriani.
Una incursión en las altas montañas del Gran Cáucaso. El viajero más aventurero se adentrará en las tierras altas de Tusheti, de difícil acceso, patria de los pastores nómadas, que solo las habitan en verano. Esta escapada le reserva la naturaleza en su estado más crudo, antiguos pueblos fortificados de piedras secas, rebaños, perros y pastores. De paso, se puede visitar la agradable Kajetia, la región del vino y de los cantos polifónicos más inquietantes, y el lugar donde se recogen todas las tradiciones de la montaña.
También podrá dirigirse hasta la aislada Khevsureti, casi deshabitada, con sus impresionantes auls —pueblos fortificados —, entre los que destaca Shatili, perfectamente conservado.
Con un poco más de comodidad podremos dirigirnos a Khévie, en la Carretera militar de Georgia, el único paso natural en el corazón del Cáucaso. Verdadera fortaleza de las montañas, ofrece una panorámica sobre las regiones perdidas de montaña y una puerta de acceso a la región de Khevsureti. En Kazbegi, sobre el monte Kazbek, se halla la iglesia de la Trinidad de Gergeti (Tsminda Sameba), pintoresco santuario de las montañas georgianas.
Si buscamos un ambiente diferente, se puede cruzar todo el país para perderse en los altos valles del extremo oeste, en Svanetia, la región más remota y misteriosa de Georgia, conocida por sus altas cimas, sus aldeas con torres fortificadas, sus capillas perdidas y sus rudos habitantes. Observaremos el lugar habitado más alto de Europa, hermosos paisajes de montaña y curiosas tradiciones. Para llegar allí hemos de atravesar previamente la región subtropical de Mingrelia, que posee unas particularidades lingüísticas, culturales y culinarias muy marcadas.
Lo más importante para la organización de esta etapa es planificar región por región; el sentido práctico nos llevará a buscar un lugar céntrico que nos permita desplazarnos de manera eficaz y así conocer desde él el mayor número de lugares. El recorrido sugerido hace que funcione con diferentes opciones y que podamos afrontarlo en su totalidad o por separado.
Días 1 a 6: Tiflis y sus alrededores, el corazón de Georgia
Día 1: avenida Rustaveli, museos (Djanachia, Bellas Artes de Georgia); Mtatsminda.
Día 2: casco antiguo, museo de la ciudad, fortaleza, iglesias y templos. Barrio de Avlabari, jardines botánicos y los baños de azufre.
Día 3: orilla izquierda, avenida de Aghmachenebeli, bazar. Los prestigiosos barrios de Vera y Vake, el museo Etnográfico al aire libre y el lago de