Название | 101 cuentos sanadores |
---|---|
Автор произведения | Susan Perrow |
Жанр | Сделай Сам |
Серия | Colección Vivir con niños |
Издательство | Сделай Сам |
Год выпуска | 0 |
isbn | 9788412322132 |
Cuando se escribe un cuento para un niño que tiene un amigo o un familiar con una enfermedad terminal (o que ya ha fallecido), sería totalmente inadecuado crear cuentos donde el enfermo se recupera y vive feliz para siempre. El creador de cuentos tiene una gran responsabilidad, ya que debe intentar crear una imagen más importante para llegar a una resolución que lleve al oyente a un lugar incluso más elevado o diferente del terrenal. Por otro lado, sería ideal que, cuando los padres escriban cuentos para sus propios hijos, lo hagan desde sus propias convicciones religiosas o filosóficas. Asimismo, los maestros o terapeutas deben tener en consideración las creencias de la familia a la hora de escribir un cuento. Véanse cuatro ejemplos en los siguientes cuentos: “La mariposa” (página 133), “El manto de luz del abuelo” (página 133), “La paloma arcoíris” (página 137) y “El cerezo y su amigo dorado” (página 132).
Independientemente de lo simple o complejo que sea el desarrollo del cuento, es fundamental que la resolución implique un final feliz y lleno de esperanza. En los cuentos terapéuticos, al igual que en los cuentos populares y los cuentos de hadas, subyace el tema profundo del bien que vence al mal, porque los niños del mundo entero necesitan escuchar este mensaje esperanzador; esto quiere decir, por lo tanto, que el género de cuentos “reales” con finales tristes debe introducirse gradualmente según la edad de los pequeños y fascinados oyentes. Los niños mayores —en el último curso de primaria o ya en secundaria—, que estudian la vida de los personajes célebres de la historia, pueden soportar los finales tristes o trágicos; están preparados para hacer frente a la cruda realidad de los primeros exploradores que sufrieron una muerte muy dura debido a la hambruna o a las historias de guerra llenas de desolación y desesperación. Sin embargo, en el momento de tomar decisiones, no olvides que los niños mayores, los jóvenes e incluso los adultos necesitan igualmente la satisfacción y el alimento de un “final feliz” de vez en cuando. ¡En el caso de las terapias, la mayoría de las veces es lo que realmente necesitan!
EJEMPLOS DE RESOLUCIÓN POSITIVAS
CUENTOS | COMPORTAMIENTO/SITUACIÓN EN DESEQUILIBRIO | RESOLUCIÓN: RECUPERACIÓN DEL EQUILIBRIO |
“El Gigante de la sombra” (página 102) | Predominan la avaricia y el poder. | “Fortaleza en el cariño, fortaleza en la unidad”. |
“Las hormigas y la tormenta” (página 105) | Niños con ansiedad tras un terremoto que derrumbó el edificio de su jardín de infancia y algunas casas del lugar. | Tranquilizarlos con la garantía de que sus maestros y sus padres los protegerán. |
“Los palillos de ritmo” (página 80) | Comportamiento ruidoso de manera continua. | Ruido bajo control; polaridad y ritmos sonoros. |
“Tan perfecta no era la casa” (página 116) | Exceso de perfección; con ansiedad si las cosas no son perfectas. | Más relajado; comprende que las cosas no siempre pueden ser perfectas y no pasa nada. |
“La familia wombat” (página 146) | Niño de tres años y medio que todavía quiere seguir tomando leche materna; madre agotada que no quiere seguir con esta situación; madre a la que también le gustaría que aumentara el vínculo del niño con su padre. | El niño pierde interés en mamar; se hace más independiente y disfruta con las nuevas aventuras que tiene con su papá. |
“En el parque del océano” (página 151) | Juego patoso y caótico. | Más cuidadoso al jugar y, el juego en sí, más constructivo. |
“Una familia de caracoles” (página 179) | Con ansiedad cada vez que tiene que cambiar de una casa a la otra. | Contento en los dos hogares; emocionado cada vez que le toca quedarse en la otra casa. |
“Los gnomos y las coronas doradas” (página 219) | Miedoso, falta de confianza y resiliencia. | Fortaleza y valor. |
“Pequeño Lobo” (página 196) | Siempre se queja, nada le hace feliz. | Se le despierta el interés y la motivación. |
“El niño y la caracola color perla” (página 257) | Incapacidad para escuchar a los demás; no para de hablar. | Aprende a escuchar. |
“Un robot muy tímido” (página 246) | Introvertido, falta de confianza al hablar. | Consigue seguridad al hablar. |
“El pez cubierto de percebes” (página 264) | Se hace caca encima; no va al baño. | Lleno de confianza cuando va al baño; experimenta una nueva libertad. |
“El camaleón inteligente” (página 120) | Se burlan de él continuamente; siempre es la víctima . | Supera la intimidación; consigue tener autoconfianza. |
“El árbol de las reverencias” (página 149) | Avaricioso; no se preocupa por los demás. | La alegría de cuidar a los demás y de compartir. |
“El caballo alado” (página 216) | Inseguro, sin motivación. | Gana confianza y motivación. |
“Los caballos arcoíris” (página 209) | Intolerancia ante las diferencias. | Aceptación de las diferencias. |
“La excavadora dice que no” (página 275) | Niño bloqueado; siempre dice “No”. | El niño “se desbloquea” y se vuelve más complaciente y colaborador. |
EL MISTERIO Y LA MAGIA DE LAS METÁFORAS
En términos sencillos, una metáfora nos muestra una cosa como si fuera otra y, al hacerlo, amplía nuestra visión del mundo, además de refrescar y reavivar, con frecuencia, nuestra percepción.
A través de las imágenes, la metáfora se dirige directamente a nuestras facultades imaginativas, eludiendo nuestro cerebro racional. Estos desvíos y caminos metafóricos nos permiten explorar las ideas, fuerzas y poderes que yacen detrás o más allá de nuestro pensamiento racional. Al superar las limitaciones de nuestros encasillamientos y de nuestro lenguaje rutinario, con su tosquedad y complicación, la metáfora ofrece, a través de un proceso misterioso y mágico, una forma de conocimiento “superior” o más holístico:
La metáfora se yuxtapone a los conceptos habituales para revelar conceptos más elevados y arquetípicos. Estos conceptos más elevados no se pueden traducir literalmente a la lengua cotidiana porque “carecen de nombre”; no existe ninguna palabra definible ligada a estos “seres del pensamiento” ni tampoco son accesibles al razonamiento abstracto y lógico. Son intuiciones poéticas que se encarnan en el pensamiento y el lenguaje a través de la