Derechos humanos. Andrew Clapham

Читать онлайн.
Название Derechos humanos
Автор произведения Andrew Clapham
Жанр Социология
Серия
Издательство Социология
Год выпуска 0
isbn 9789561424876



Скачать книгу

derechos humanos. A medida que se revocan y anulan las leyes, existe una percepción válida de que la legitimidad, o incluso la legalidad, de toda ley debe ser juzgada ante la ley de los derechos humanos. La jerarquía entre el derecho de los derechos humanos (o constitucionales) y el derecho nacional normal se refleja hoy en día a nivel internacional en la jerarquía entre el derecho internacional general y ciertas prohibiciones del derecho internacional “superior” (conocidas como normas “perentorias” o “jus cogens”).

      Los derechos humanos operan desde un plano superior y se utilizan para criticar las leyes normales.

      Cuarto, apelar a los derechos y garantizar el respeto de los derechos es una forma de, no solo lograr un objetivo fijo, sino cambiar el sistema en el que vivimos. Los derechos humanos son importantes como instrumentos para el cambio en el mundo. Los derechos humanos han evolucionado de ser una idea de los derechos individuales de los ciudadanos a ser una proclamación revolucionaria nacional (como la Declaración Francesa de 1789 o los acuerdos políticos contenidos en la Carta Magna de 1215). Hoy en día, los derechos humanos no solo son fundamentales para cambiar la legislación nacional, sus principios se consideran relevantes para los proyectos internacionales de asistencia para el desarrollo, al facilitar la justicia transicional durante los cambios de regímenes, lidiar con la reconstrucción posterior a los conflictos, así como luchar contra la pobreza y los efectos del cambio climático.

      Quinto, para algunos existe una asociación histórica entre los derechos humanos y las preocupaciones occidentales, por lo que ha sido tentador desestimar a quienes plantean el tema de los derechos humanos como separados de las privaciones reales de las que hablan. El ejemplo de una joven acaudalada quejándose por la falta de estacionamientos es, por supuesto, deliberadamente absurda e irónica. Pero la historia de Kundera ilustra cómo la indignación por los derechos humanos puede parecer rápidamente ridícula, incluso hipócrita, a medida que ciertos gobiernos occidentales sancionan y apoyan de manera selectiva las violaciones de los derechos humanos. Sin embargo, sería un error exagerar la asociación de los derechos humanos con la hipocresía occidental. De hecho, el movimiento moderno de los derechos humanos y el complejo marco normativo internacional han surgido de una serie de movimientos transnacionales y generalizados. Los derechos humanos fueron y son cada vez más invocados y reivindicados en los contextos de antiimperialismo, antiapartheid, antirracismo, antisemitismo, anti homofobia, anti islamofobia y luchas feministas e indígenas en todas partes. Es posible que los gobiernos occidentales hayan dominado recientemente el discurso en los más altos niveles internacionales, pero los cánticos en las calles no se basaron necesariamente en ellos, ni cantaron al ritmo de Occidente.

      Sexto, el sentido de solidaridad entre quienes creen que son víctimas de una violación de los derechos humanos puede trascender las distinciones de clase, género, entre otras. Este sentido de conexión es fundamental para comprender el mundo cambiante de los derechos humanos. El movimiento de los derechos humanos involucra grandes organizaciones con sede en Occidente y pequeños grupos locales de investigación y defensa que se esfuerzan por revelar algunos de los peores abusos. Más aún, parte de la justificación de la primacía de ciertas normas de derechos humanos en el derecho internacional público es que ciertos actos ofenden la conciencia de la humanidad de tal modo que deben ser procesados como crímenes de lesa humanidad. Es el sentido de humanidad común y sufrimiento compartido lo que mantiene al mundo de los derechos humanos en movimiento y explica el gesto de protesta contra una violación a los derechos humanos.

      Por último, a través de los ojos de Kundera y Brigitte observamos varias lógicas diferentes de los derechos humanos en función de la cultura, el tiempo, el lugar y el conocimiento. Esta es una historia europea, ambientada en la capital, y que captura el estado de ánimo justo al final de la Guerra Fría. Hay historias contemporáneas africanas, asiáticas o estadounidenses que serían muy diferentes, pero sugerimos que Kundera nos ayuda porque identifica este gesto contemporáneo especial como un sentimiento humano interno que impulsa el discurso. El vocabulario de los derechos humanos no es una simple revelación de una estructura universal profunda que todos comprendemos de manera innata. Tampoco es un idioma para ser aprendido en la adultez. Es la historia de luchas relacionadas con la injusticia, la inhumanidad y un mejor gobierno. Y al mismo tiempo, los estados pueden invocar los derechos humanos para promover sus propios objetivos de política exterior. A menos que entendamos algunas de las fuerzas impulsoras detrás de los derechos humanos, corremos el riesgo de perder las corrientes que determinarán su dirección futura. El escepticismo de Kundera puede sacudirse, pero también toca una fibra sensible. La contradicción entre nuestro compromiso con la lógica moral “obvia” de los derechos humanos y nuestro cinismo hacia ciertas demandas de derechos debe abordarse de frente si queremos entender el mundo de los derechos humanos en la actualidad.

      Para apelar de manera contemporánea y sincera a los derechos humanos, no necesitamos buscar más que una demanda reciente sobre alguna detención en la Bahía de Guantánamo (véase el Recuadro 6).

       Recuadro 6 . Extracto de una demanda presentada por Reprieve sobre un contrato entre la empresa de seguridad G4S y las autoridades de Estados Unidos responsables de las detenciones en la Bahía de Guantánamo.

      Emad Hassan es un ciudadano yemení que fue secuestrado mientras estudiaba en Pakistán. Durante un interrogatorio se le preguntó si conocía a Al Qaeda y respondió que sí. Sin embargo, se refería a una pequeña aldea llamada Al Qa’idah cerca de su casa en Yemen y no a la red terrorista mundial. Este grave malentendido se transformó en la base de la detención de Hassan sin cargos ni juicio en la Bahía de Guantánamo durante casi doce años.

      Hassan viajó de Yemen a Pakistán para estudiar poesía, pero sus estudios terminaron cuando las fuerzas paquistaníes lo detuvieron en una redada en su residencia estudiantil. Hassan fue vendido a las fuerzas estadounidenses por una recompensa de 5.000 dólares y llevado a la Bahía de Guantánamo. En 2009, un grupo de trabajo interinstitucional compuesto por seis cuerpos diferentes del gobierno de Estados Unidos, incluido el FBI y la CIA, autorizó su liberación. A pesar de que su liberación ya fue aprobada, Hassan permanece en detención indefinida.

      Hassan emprendió la huelga de hambre más larga en la historia de Guantánamo. Durante ocho años se negó a comer y tuvo que soportar la alimentación forzada dos veces al día. Hassan es abusivamente alimentado a la fuerza más de cinco mil veces desde 2007 como parte de los esfuerzos del ejército por romper su espíritu. Como resultado, sufre de graves lesiones internas.

      Debido a la alimentación forzada, Hassan contrajo pancreatitis severa y una de sus fosas nasales se cerró por completo.

      En su momento Hassan indicó que: “A veces me siento en la silla y vomito. Nadie dice nada. Incluso si me dieran la espalda, lo entendería. Busco humanidad. Todo lo que pido son derechos humanos básicos”.

      Конец ознакомительного фрагмента.

      Текст предоставлен ООО «ЛитРес».

      Прочитайте эту книгу целиком, купив полную легальную версию на ЛитРес.

      Безопасно оплатить книгу можно банковской картой Visa, MasterCard, Maestro, со счета мобильного телефона, с платежного терминала, в салоне МТС или Связной, через PayPal, WebMoney, Яндекс.Деньги, QIWI Кошелек, бонусными картами или другим удобным Вам способом.

/9j/4RTxRXhpZgAATU0AKgAAAAgABwESAAMAAAABAAEAAAEaAAUAAAABAAAAYgEbAAUAAAABAAAA agEoAAMAAAABAAIAAAExAAIAAAAhAAAAcgEyAAIAAAAUAAAAk4dpAAQAAAABAAAAqAAAANQALcbA AAAnEAAtxsAAACcQQWRvYmUgUGhvdG9zaG9wIDIyLjQgKE1hY2ludG9zaCkAMjAyMTowODoxMiAw ODoxNDowMQAAAAOgAQADAAAAAf//AACgAgAEAAAAAQAAC7igAwAEAAAAAQAAEagAAAAAAAAABgED AAMAA