Aunque ahora dé lo mismo. Gabriela Scuadritto

      ©Gabriela Squadritto

      Aunque ahora dé lo mismo

      Segunda edición de 300 ejemplares: enero 2020

      [Primera reimpresión]

      Editor de colección: Rodrigo Peralta

      Diseño y diagramación: Ediciones Filacteria

      Diseño de portada: Gabriela Squadritto

      Ilustraciones: Gabriela Squadritto

      Reg. Prop. Int. Nº: 294-361

      ISBN: 978-956-9896-29-3

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      Índice

      Prólogo 7

      Amor 11

      Pena de Amor 73

      Prólogo

       Inconvenientes de escribir (y publicar) un libro de poemas de amor (o libro en general)

       — El riesgo de que lo encuentren mamón, fome, malo, trillado.

      — El riesgo de que te encuentren mamona, fome, mala, trillada.

      — El riesgo de que algún día tú lo encuentres mamón, fome, malo y trillado, sufrir una caña moral épica que haga que no vuelvas a escribir ni la lista del súper.

      — El riesgo de encasillarte con cierto estilo y que todo lo que hagas de ahora en adelante deba seguir eso.

      — El riesgo de que piensen que todo te pasó a ti.

      — El riesgo de que descubran lo que, efectivamente, te pasó a ti.

      — El riesgo de que piensen que actualmente estás toda hecha mierda.

      — El riesgo de que futuros pretendientes lo piensen, que huyan a la velocidad de la luz.

      — El riesgo de que tus ex lo piensen y se sientan muy importantes.

      — El riesgo de que tus ex, efectivamente, descubran los que inspiraron ellos.

      — El riesgo de que tus ex, efectivamente, descubran los que inspiraron ellos y crean las licencias creativas que te diste para que los textos fueran más interesantes.

      — El riesgo de exponerte si afirmas que te pasó.

      — El riesgo de que los demás pierdan interés si afirmas que no te pasó.

      — El riesgo de incomodar a tu familia, por hablar «de la cintura para abajo».

      Pero qué se le va a hacer. A lo William Wallace nomás.

      G. S

       «No es tu sexo lo que en tu sexo busco sino ensuciar tu alma: desflorar con todo el barro de la vida lo que aún no ha vivido».

       Leopoldo María Panero

      AMOR

      1 Sé que te gusto (te abrazo un par de segundos más de lo normal).

      Sabes que me gustas

      (me besas maliciosamente cerca de la boca).

      ¡Pero es tan entretenido

      fingir que es un misterio!

      2 El mejor momento del día es cuando estoy sola (de pie en la micro, mirando la nada, a punto de dormirme) y puedo pensarte a mis anchas.

      3 Comentario en foto de facebook: «Sales bien».

      Respuesta:

      «Mijito».

      Borrar.

      «Te comería con cuchara».

      Borrar.

      «Gracias».

      4 Nada es más decepcionante que estar esperando una llamada, emocionarte cuando el celu suena y que te ofrezcan un plan.

      5 Un amor es una marca que compras siempre.

      Un seductor es

      un comercial que te saca una sonrisa.

      Un jote es

      un pop-up que te impide ver tu serie.

      6 Sábado, nueve de la mañana. Veo que estás conectado en el chat («Mientras me visto, lo voy a saludar»).

      Domingo, doce y media de la noche.

      Todavía en pelota,

      todavía hablando contigo,

      te comento:

      «Olvidé desayunar».

      7 Quiero pensar en ti con una canción, pero te conozco hace tan poco que no tenemos ninguna.

      8 Hoy nos vemos. Llevo cuarenta y cinco minutos frente al espejo únicamente eligiendo mi ropa interior.

      9 Me enternece pensar que ese señor, que cruza la calle, es el amor de la vida de alguien.

      10 Nos juntamos una noche a ver películas en tu casa: nos hicimos unas pizzas, un aperitivo suave, y nos quedamos conversando hasta las cinco (de la tarde).

      11 Quiero pasar contigo un domingo en la mañana, un domingo en el que nada logre levantarnos. Acurrucarnos en bata y ver tele mientras desayunamos té y pan con palta, y que no nos importen las penas, ni lo que espere la gente, ni el carpe diem incompleto, ni las migas en la cama.

      12 ¿Por qué no salimos como buenos amigos (a un motel)?

      13 Una hora antes: «Si solo nos juntaremos a conversar un poco y a tomar once».

      Una hora después:

      «Nos tomamos

      como once».

      14 El corazón es como un lego: no está roto, sólo desarmado.

      15 La angustia no me deja dormir: no es posible que todo sea tan bueno.

      16