Meditaciones diarias para la vida espiri. Henri J. M. Nouwen

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Название Meditaciones diarias para la vida espiri
Автор произведения Henri J. M. Nouwen
Жанр Документальная литература
Серия
Издательство Документальная литература
Год выпуска 0
isbn 9788428835084



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depende totalmente de esta idea. Me pregunto constantemente si estoy de veras permitiendo que mi vida esté determinada por esa verdad. Quizá parte de la razón por la que dudo en acoger plenamente esta verdad es que me incita a dejar de tener control sobre mi vida y dejar que Dios sea Dios, mi Dios, el Dios de mi prójimo, el Dios de toda la creación. Pero me doy cuenta también de que mientras no «haga» esto, mi vida es una ilusión y desaprovecho la mayor parte de mi energía tratando de mantener viva esa ilusión.

      ¿Significa esto que mis pensamientos, planes, proyectos e ideas no importan ya? A esta conclusión es a la que llega la gente que se ha servido de la vida espiritual como una manera de manipular a los demás, y esa conclusión ha llevado, tristemente, a falsas perspectivas sobre el ascetismo, la obediencia, la entrega a la voluntad de Dios, y a ciertas formas de abnegación. La persona convertida no dice que nada importe ya, sino que todo lo que existe ocurre en Dios, y que él es la morada donde somos capaces de conocer el verdadero orden de las cosas. En lugar de decir: «Nada importa ya, porque sé que Dios existe», la persona convertida dice: «Todo está ahora revestido de luz divina y, por tanto, no hay nada que carezca de importancia».

      ¡Gracias!

      27 DE ENERO

      ¿Estás en casa?

      Hoy día, preocuparte significa estar ocupado y preocupado con muchas cosas, estando al mismo tiempo aburrido, resentido, deprimido y muy solo. No estoy diciendo que todos estemos preocupados de forma tan intensa todo el tiempo. Pero creo que no cabe duda de que la experiencia de estar colmado y al mismo tiempo insatisfecho nos afecta a todos en cierta medida en algún momento. En este mundo tan tecnológico y competitivo es difícil evitar por completo las fuerzas que ocupan nuestro espacio interno y externo y nos desconectan de nuestro yo más profundo, de los demás seres humanos y de Dios.

      Uno de los rasgos más importantes de la preocupación es que fragmenta nuestra vida. Todas las cosas que tenemos que hacer, pensar, planear; todas las personas a las que debemos recordar visitar, hablar; todas las causas que debemos atacar o defender..., todo esto nos fragmenta y nos hace perder nuestro centro. Al preocuparnos, estamos «en todas partes», pero casi nunca en casa. Una forma de expresar la crisis espiritual de nuestro tiempo es decir que la mayoría de nosotros tenemos una dirección postal en la que nunca se nos encuentra.

      Cambiar desde el corazón, escuchar al espíritu

      28 DE ENERO

      Cambia tu centro de gravedad

      La respuesta que da Jesús a nuestras vidas llenas de preocupaciones es muy diferente. Nos pide que cambiemos nuestro centro de gravedad, que resituemos el centro de nuestra atención, que desplacemos nuestras prioridades. Jesús quiere que pasemos de estar en las «muchas cosas» a estar en «la única cosa necesaria». Es importante que nos demos cuenta de que Jesús no quiere en absoluto que abandonemos nuestro diversificado mundo. Al contrario, quiere que vivamos en él, pero firmemente arraigados en el centro de todas las cosas. Jesús no habla sobre un cambio de actividades, un cambio de contactos, ni siquiera de un cambio de ritmo. Habla de un cambio de corazón. Este cambio de corazón hace que todo sea diferente, aun cuando parezca seguir igual. Este es el significado de «buscad sobre todo el reino de Dios [...] y todo esto se os dará por añadidura». Lo que cuenta es dónde está nuestro corazón. Cuando nos preocupamos, ponemos nuestro corazón en el lugar equivocado. Jesús nos pide que pongamos nuestro corazón en el centro, donde todo lo demás terminará encajando.

      Cambiar desde el corazón, escuchar al espíritu

      29 DE ENERO

      Conviértete en el amado

      Mientras «ser el amado» sea poco más que un hermoso pensamiento o una idea elevada suspendida sobre mi vida, que evita que caiga en la depresión, entonces nada habrá cambiado realmente. Lo que es necesario es convertirse en el amado en medio de las trivialidades de mi vida cotidiana e ir paso a paso cerrando el hueco que existe entre lo que sé que soy y las innumerables realidades de la vida diaria. Convertirse en el amado es hacer descender la verdad que se me ha revelado hasta las banalidades de aquello en lo que pienso, hablo y hago hora tras hora.

      Tú eres mi amado

      30 DE ENERO

      Saborea plenamente el instante

      Asegúrate de saborear plenamente el instante. El Señor siempre se revela ante ti cuando estás más enteramente presente. En tu oración, trata de presentar tus preocupaciones, problemas y temores ante él y deja que él te enseñe el camino para seguirle. Lo más importante de todo es seguir al Señor. El resto es secundario. Si le sigues, puedes seguirle como sacerdote, como ministro laico, como una persona soltera o casada; pero lo que cuenta es que él sea el centro.

      Carta inédita

      31 DE ENERO

      Una oración

      Querido Dios:

      Quiero siempre tanto tener el control.

      Quiero ser el dueño de mi propio destino.

      Pero sé que dices:

      «Deja que te lleve de la mano y te guíe.

      Acepta mi amor

      Y confía en que, allí donde te llevo,

      se satisfarán los deseos más profundos de tu corazón».

      Señor, abre mis manos para que reciba el regalo de tu amor.

      Amén.

      Con las manos abiertas

      FEBRERO

      1 DE FEBRERO

      Mi verdadera identidad

      Lo primero que me sorprendió cuando vine a vivir a una casa con gente con discapacidad mental fue que el que les gustara yo o no no tenía absolutamente nada que ver con todas las cosas útiles que había hecho yo hasta entonces. Como nadie podía leer mis libros, mis libros no impresionaban a nadie, y como la mayoría de ellos nunca habían ido al colegio, mis veinte años en Notre Dame, Yale y Harvard no eran importantes, no me servían como presentación...

      El no poder usar ninguna de las habilidades que me habían resultado tan útiles en el pasado era una verdadera fuente de inquietud. Me vi de pronto frente a mi yo desnudo, abierto a aseveraciones y rechazos, abrazos y puñetazos, sonrisas y lágrimas, y todo ello dependía únicamente de cómo me veían en ese momento. En cierto modo parecía como si estuviera comenzando mi vida de nuevo. Ya no podía dar por hechos mis relaciones, mis contactos ni mi reputación.

      En muchos sentidos, la experiencia fue, y sigue siendo, la experiencia más importante de mi nueva vida, porque me obligó a redescubrir mi verdadera identidad. Aquellas personas rotas, heridas y completamente humildes me obligaron a deshacerme de mi yo relevante (el yo que puede hacer cosas, mostrar cosas, demostrar cosas, construir cosas) y me impulsaron a recuperar ese yo desnudo y sin adornos en el que soy totalmente vulnerable y estoy abierto a recibir y a dar amor sin que los éxitos tengan ninguna importancia.

      En el nombre de Jesús

      2 DE FEBRERO

      Dios plantó su tienda entre nosotros

      Cuando san Juan dice que el amor perfecto expulsa el temor, está indicando un amor que proviene de Dios, un amor divino. No habla de amor humano, de compatibilidades psicológicas, de atracción mutua ni de profundos sentimientos interpersonales. Todo eso tiene su valor y su belleza, pero el amor perfecto del que habla san Juan acoge y trasciende todos los sentimientos, emociones y pasiones. El amor perfecto que expulsa todo nuestro temor es el amor divino, en el que estamos invitados a participar. El hogar, el lugar íntimo, el lugar de verdadera pertenencia, no es, por tanto, un lugar hecho por manos humanas. Está construido por Dios, quien vino a plantar su tienda entre nosotros,