Название | Musculación práctica |
---|---|
Автор произведения | Lou Schuler |
Жанр | Сделай Сам |
Серия | Musculación |
Издательство | Сделай Сам |
Год выпуска | 0 |
isbn | 9788499104782 |
Musculaciónpráctica
Un plan desmitificador de preparación física para hombres y mujeres que quieren una zona media poderosa y una espalda sin dolores
Lou SchulerAlwyn Cosgrove
Esta edición se ha publicado según el acuerdo con Avery, miembro de Penguin Group (USA) Inc.
Copyright de la edición original: © 2010, by Lou Schuler and Alwyn Cosgrove
Título original: The New Rules of Lifting for Abs
Traducción: Pedro González del Campo Román
Diseño cubierta: Rafael Soria
© 2013, Lou Schule
Alwyn Cosgrove
Editorial Paidotribo
Les Guixeres
C/ de la Energía, 19-21
08915 Badalona (España)
Tel.: 93 323 33 11 – Fax: 93 453 50 33
E-mail: [email protected]
Primera edición:
ISBN: 978-84-9910-195-8
ISBN EPUB: 978-84-9910-478-2
BIC: WSU
Fotocomposición: Editor Service, S.L.
Diagonal, 299 – 08013 Barcelona
Índice
Introducción. Si me cae un árbol encima del hombro…
DE QUÉ ESTAMOS HABLANDO CUANDO NOS REFERIMOS A LOS ABDOMINALES
1. ¿Dónde están esos abdominales que te han prometido?
2. Plan de ejercicios para el núcleo corporal
3. La zona sin flexiones cortas de abdominales
ENTRENAMIENTO DE ESPECTRO COMPLETO PARA LOS ABDOMINALES
4. Avanzando hacia la zona media
EN TODO ENTRENAMIENTO SE TRABAJA LA ZONA MEDIA
ABDOMINALES, PERDIDOS Y ENCONTRADOS
13. La conspiración contra los abdominales
14. El problema de los alimentos procesados
15. La nutrición simplificada… en lo posible
16. «¡Los que van a ponerse a dieta te saludan!»
17. Entrenamiento de convergencia
18. Respuesta a las preguntas que todavía no has formulado
IntroducciónSi me cae un árbol encima del hombro…
Mis problemas comenzaron con un árbol. Fue en diciembre de 2006, alrededor de un mes antes de mi decimoquinto cumpleaños. Un árbol había caído invadiendo el patio de al lado y yo, como buen vecino, puse en marcha la sierra mecánica y empecé a cortar el árbol en pedazos lo bastante pequeños como para llevarlos a mi leñera que distaba unos 60 metros.
Gozaba por aquel entonces de una condición física fantástica. En el gimnasio entrenaba habitualmente con pesas que se acercaban a mis mejores marcas de todos los tiempos. Fuera del gimnasio me sentía lo bastante fuerte como para afrontar cualquier situación que un tipo de una familia del extrarradio se viera obligado a resolver.
Digamos, por ejemplo, un árbol caído.
Mi coqueta sierrecita mecánica desertó antes