En el día. Verdad chistosa. СтаВл Зосимов Премудрословски

ah, ah! – Madame Madame Ivanova espetó, apedreada por la morfina médica. – Doctor, ¡oh, querido doctor! – Rezo en Cristo, ¿se te ocurre algo? Ouch… Ouch! ¡No se lo digas a tu marido! Es un bandido genial. Qué, y fui solo a Papúa Nueva Guinea …, Oaya, para escribir mi tesis, ¡Guau! ¡Sobre los grupos locales allí! ¡Sí! ¡Oh, dólares, dólares llorando! Un cortacésped ($ 1000), de lo contrario es vulnerable, un asesino del sexto y más alto nivel, puede matar a mi aciano y a ti, tal vez a mí.

      – ¿Y tengo que ver con eso? – Sorprendió al doctor.

      – ¡Jódelo, remojo, cómo darle un trago!

      – Señora, cállate, necesitas salvarte, tienes ráfagas debajo del ombligo y sobre las rodillas… Mdaaa… Algo que consideraremos científico. Lena! Helen! – Llamó a un joven aprendiz, una escuela de medicina local, con el nombre de Dandelion.

      Dandelion Lena, apretando el culo y charlando coquetamente con ella, se apoyó contra el médico.

      – Sí, Putin Donald Trump. Estoy listo…

      – ¿Y por qué tienes el nombre de Dandelion?

      – Y eso, jejeje. – Cubrió con una palma su larga nariz con un trapeador rojo, que solo valió la pena en las compensaciones, pero parecía una virgen. – por tipo, me encontraron en el repollo y me alegro.

      El médico miró a su alrededor, aún no arrugado, figura delgada, y, expandiendo los ojos, respiró hondo el perfume y se sacudió las pestañas.

      – Wow, robando, irás a la sala de emergencias, pregunta al Sr. Ivanov. Le responderá cuando responda que el nacimiento tuvo lugar en el modo normal normal, pero debido a una mutación, los genes no convergieron y nació un niño negro. Lo entiendes?

      – Sí, señor camarada Putin Donald Trump. – y la enfermera desapareció orgullosamente en la puerta. Resulta en la sala de emergencias y dice:

      – Hola, ¿y quién es el Sr. Vasil Ivanov?

      Se levanta y responde en voz alta:

      – yo!!!!

      Ella lo miró de arriba abajo, levantando su cuello hasta el límite, sus músculos masivos, especialmente alrededor de sus hombros y cuello y asustados, le abrieron los ojos, la boca y la nariz con miedo. Después de que ella retrocedió y regresó enrojecida ante el médico.

      – Yo, señor camarada Putin Donald Trump, me temo. Es tan grande, fuerte y tonto. – Y sollozó con lágrimas amargas. El médico tomó el dobladillo de su bata y se secó los ojos, untando lágrimas espesas y gelatinosas en su rostro, como una señora de la limpieza que se limpia el polvo de una ventana. Como confirmación de esto, él también respira en su cepillo, ahuyentó a las moscas y trató de continuar con el rallador, pero Lenochka, empujándose, corrió a la sala de tratamiento y, cerrando desde adentro, se quedó dormida en el sofá. Si no se escuchaban sus ronquidos de cerdo en el pasillo, entonces los camaradas enfermos locales habrían roto la cerradura de la puerta, querían lavarse.

      El cuerpo de Ivanov se destacó bruscamente entre los esperados, sobre todo teniendo en cuenta que estaba allí solo, sin contar a la vieja rata, que mordió la esquina de linóleo debajo de la silla siguiente, masticando modestamente. El doctor, horrorizado por el volumen de lo esperado, se quejó. Pensé que, sin darse cuenta, caería bajo una mano caliente y patearía una rata en la cara, salió corriendo de la sala de espera.

      – ¿Qué hacer, qué hacer? – Murmuró por lo bajo y se dirigió a su oficina. – ¡Vo! – Lo bajó y cogió el teléfono de su pecho, marcó el número del teléfono de rescate. – Ole, ole… Merkel?.. Soy yo, Putin Donald Trump. Escucha colega, ¿tienes algún paciente por ahora?

      Theresa Merkel May, fue compañera de estudios y trabajó para una desintoxicación médica local.

      – Hay… y qué? – preguntó Theresa Merkel May,

      – Envíalo a mí para declarar el nacimiento de un pariente. Entonces lo pagaré.

      En este momento, dormí en una cama dura y me preparé para la salida. Para ser sincero, recordaba vagamente cómo me llevaron a la estación de sobriedad, pero ya estaba haciendo planes para una resaca. Veinte minutos después fui escoltado al hospital, sin saberlo yo mismo. Yo mismo parecía más delgado desde el nacimiento, al mismo tiempo, sin hogar (descendientes experimentados de la vida mundana). Mis ojos se hinchaban como una rana. Dos verrugas grises crecieron en la barbilla y la nariz izquierdas. De los dientes solo tenía dos tocones podridos y cuatro raíces. La manzana de Adamant Adam se abultaba abundantemente alrededor de su cuello, el resto parecía simple: un conjunto de mis huesos encajaba en una bolsa de cuero y los huesos sin afeitar complementaban la vista de mi cuerpo.

      Después de poner mi propina en una silla, traté de aislar la silueta bifurcada de un médico frente a mí.

      – Hola Vasya. me saludó

      – Sí Respondí

      – ¡Aquí, doscientos gramos de alcohol puro! – Tiró del vaso hacia mí. – Pero necesita ser resuelto. En general, irá a la sala de emergencias. Le preguntarás al Sr. Ivanov. Él responderá: "¡Yo!». Usted dice: «El nacimiento salió bien, pero debido a la mutación, los genes no encajaron y nació el niño negro. ¿Entiendes?».

      Alcancé un vaso. El doctor lo sostuvo.

      – ¿Entendido?

      – ¡Sí! – surgió nerviosamente de mi alma, y tragué el vaso. Me pusieron una bata blanca, una gorra y la arrojaron fuera de la oficina. Es bueno que haya logrado vaciar el vaso. Y señalando la puerta de la sala de emergencias, la vieja levadura se hizo sentir.

      Salí y pedí hipo.

      – ¿Quién es Ivanov? Hk

      – yo!!! – Sonó en mis oídos.

      – Escucha, hermano, el parto salió bien. Mirándolo como una torre de agua, continué, pero mi cabeza estaba cansada y mi cuello se adormeció y bajé la mirada hacia su ombligo, enderezando la cabeza. – normal, ik, pasado, ik, parto. Si!!! Pero jodes tu mina con agua, ¿verdad? ¡Y entonces nació el niño sucio, ik, llamaron Génova! Y mi nombre es Vasya. Lo tengo?

      nota número12

      Tres georgianos Saakashvili…

      Me apresuro, quiero decir en el mercado, y creo que Disculpa es una hipocresía para Dios y un estímulo para el Mal, porque si te disculpas una vez, puede que te guste cómo robar, matar y acciones similares. Necesitamos arrepentirnos solo ante Dios y confiar en su gracia, ya que solo Él tiene derecho a perdonar, y la gente reza por el perdón en las oraciones, es decir: perdónanos nuestras deudas, así como perdonamos a nuestros deudores y no nos dejes caer en la tentación, sino que nos entreguemos. nosotros del maligno. Por lo tanto, es más fácil no cometer malas intenciones para no rezar a Dios por el perdón. Y la Disculpa al ofendido es una adicción pasiva a las drogas, que la conciencia del Alma todavía le pide disculpas y, por lo tanto, la razón de ello. – Pensé y comencé a recordar lo que estaba buscando y lo que necesitaba. Se detuvo, miró a su alrededor: el mercado de granjas colectivas ya está cerrando. Muchas personas recogen lentamente sus diversos bienes. Los cargadores de ruedas quitan carros llenos en contenedores, y me paro y recuerdo la razón de mi presencia aquí. Se me ocurren muchos pensamientos, y justo cuando no hay un bolígrafo a mano. Y esta vez, mis pensamientos son cómo los caballos se acelerarán y quién sabe si los recordaré nuevamente, en algún lugar de mi oficina, para arreglarlos por la eternidad, y ahora recuerdo algo más… Lo recordé y comencé a buscar al ritmo que necesita, porque el mercado se está cerrando y antes de que no pueda visitarlo debido al trabajo al que estoy ansioso y concienzudo. Miro, el primer georgiano está parado detrás del mostrador, frente a él hay un barril y la inscripción en él: "¡peces vivos!» Me acerco a él y le pregunto. Nuestro pueblo es pequeño y en relación con actividades profesionales, conozco a casi todos los residentes por nombre y apellido. En resumen, me dirijo a él por su nombre.

      – Hola,