El presente estudio propone una comprensión crítica y alternativa de un fenómeno peculiar: la jurisprudencia constitucional que se establece a sí misma como fuente obligatoria del derecho en el caso colombiano.Con la intención de disputar el entendimiento normal provisto por el tradicionalismo jurídico, el autor propone rehabilitar la ideología-jurídica para detectar las operaciones ocultas en el discurso de las fuentes del derecho de la Corte Constitucional. Esta propuesta se encamina a detectar las operaciones ideológico-jurídicas recubiertas por el discurso de la Corte Constitucional sobre la obligatoriedad de su jurisprudencia como fuente autoritativa del derecho.La rehabilitación epistemológica de la ideología-jurídica contrasta ese discurso judicial concreto, y, muestra principalmente, dos fenómenos hilvanados entre sí: la auto-legitimación de la Corte Constitucional para configurar el derecho constitucional colombiano a partir de su propio discurso y la interpelación hecha a los juristas.Ambas operaciones no solo le sirven al tribunal constitucional para legitimarse políticamente de modo subrepticio; sino que, también afecta y configura las subjetividades de los sujetos interpelados por ese discurso (los juristas comprometidos con la práctica constitucional).Este libro brinda herramientas para comprender que la estructura del discurso jurídico constitucional no configura desde el principio ni de una forma acabada a los participantes comprometidos con la práctica jurídica, sino que los sujetos, a través de su experiencia colectiva, también configuran la estructura y las condiciones de posibilidad de esas mismas prácticas. El abordaje de la ideología-jurídica es una dimensión envuelta en ese proceso complejo. Sin ella, no tendrían sentido para nosotros los discursos que allí se establecen.
El control de constitucionalidad en episodios promueve la continuidad de un debate central en las democracias constitucionales latinoamericanas, esto es, la necesidad de una mayor discusión en torno al control de constitucionalidad, ya que pueden encontrarse diversas tensiones y posiciones respecto su necesidad y carácter medular para el adecuado funcionamiento de la democracia y la materialización de la Constitución. Cada capítulo pretende ilustrar un significado y tensión particular, bien partiendo desde su concepción y evolución en la experiencia americana (capítulo I); pasando por la legitimidad del control judicial y su restricción u optimización de la democracia (capítulo II); así como por uno de los fenómenos que más ha impulsado el activismo judicial y los alcances del control de constitucionalidad, valga decir, el neoconstitucionalismo (capítulo III); hasta el estudio de dos cuestiones centrales en el constitucionalismo colombiano, de un lado, el hiperpresidencialismo, particularmente desde el estudio del control a las objeciones presidenciales (capítulo IV) y, de otro lado, la doctrina de la sustitución de la constitución como una garantía para el respeto de las decisiones fundamentales del poder constituyente originario (capítulo V). Esta obra también pretende fomentar la deliberación entre académicos, estudiantes, litigantes, funcionarios judiciales y demás operadores jurídicos.
Este libro consiste en una reflexión filosófica sobre el problema del suicidio. Se trata de una reflexión mediante la cual se espera brindar elementos que ayuden en nuestra comprensión del fenómeno de la muerte voluntaria, desde una perspectiva distinta a las tradicionales. Razón por la cual se habla de esta práctica no en términos antropológicos o sociales, sino fundamentalmente morales. Es decir, el suicidio visto como un fenómeno moral, antes que meramente social o cultural. Para cumplir este objetivo, se ha dispuesto de una estructura consistente en tres capítulos y un epílogo, donde se abordan diferentes aspectos del problema. Así, el primer capítulo consiste en un abordaje, análisis y discusión de los principales argumentos (clásicos) en contra del suicidio. El segundo capítulo, trata de la relación existente entre el suicidio y la pregunta por el sentido de la vida. El tercer capítulo consiste en responder a la pregunta de si una vida virtuosa puede terminar en suicidio. Por último, se lleva a cabo un análisis e interpretación del suicidio en Antígona, como una manera de ilustrar, literariamente, algunos de los problemas vistos en el libro
Sin duda, este libro resultará valioso para un público muy amplio, en principio filósofos y músicos; pero está escrito con tanta claridad, belleza, riqueza en metáforas, y con un cuidado por hacerse comprender y de llegar a los otros, que no dudo que resulte interesante mucho más allá del ámbito cerrado de estas disciplinas. Este trabajo permite comprender desde otra perspectiva algunas ideas centrales del pensamiento de Foucault; además, permite descubrir otras facetas de algunos filósofos como Agustín y Descartes a la luz de una arqueología de la estética musical. Es un estudio indudablemente muy serio y riguroso, cargado de sugerencias y de múltiples caminos de indagación. Se trata de un texto maduro que presenta una filosofía que quiere ser crítica, que quiere, en cierto modo, violentar, mover el piso, sacudir, pero que a la vez no quiere renunciar a la esperanza, a la promesa del encuentro, de los abrazos, de la conversación. Pedro le apuesta a la filosofía como encuentro con los otros y que, como destaca Agustín en el caso de la música, se presenta como algo que convoca y abre la posibilidad de lo común, de la comunidad.
Este libro, desde una mirada sistémico-construccionista y a través de narrativas y voces de personas, muestra un recorrido por situaciones de crisis que afectaron sus relaciones familiares y por la construcción de procesos generativos de resignificación, transformación y nuevos contextos. Dos momentos que llevaron, por un lado, a prácticas de reacomodamientos en la organización familiar y, por el otro, a cambiar las percepciones sobre el proceso y el concepto crisis que va desde miradas puestas en «la destrucción y la tragedia» dentro de contextos sociofamiliares hasta la construcción de miradas que ubican las crisis como aprendizajes, reconocimiento de fortalezas, luchas y logros de nuevas formas de vida. En medio de este trayecto, se encuentran algunas razones que permiten comprender cómo en las familias se entrelazan los conflictos con las oportunidades para co-construir y reconocer capacidades de transformación con toques más democráticas y liberadoras. Es la respuesta a cómo emergen lenguajes creativos y propositivos durante los juegos que oscilan entre el problema y el cambio. Las huellas del recuerdo regresan con otro matiz y nuevas perspectivas. Finalmente, en el libro se muestran algunos lineamientos que sirven para enriquecer procesos de trabajo con personas y familias, en el campo de las relaciones familiares y los procesos generativos.
Si bien los campos de estudio que hasta ahora han abordado los conflictos por recursos naturales han hecho aportes incontestables, estos presentan las limitaciones propias de su especialización, como el uso de un solo enfoque y, en muchos casos, de un único nivel de análisis. Por esta razón, en este libro se plantea una perspectiva intserdisciplinar y se propone la categoría de análisis de conflicto ambiental intratable para desentrañar las distintas formas en las que el ejercicio del poder ha conspirando para producir los rasgos de intratabilidad que se encuentran en el caso de San Isidro Patios (como la larga duración, la recurrencia y el fracaso de los repetidos intentos de transformación) y sus múltiples relaciones con el papel del Estado y sus instituciones, la lucha de comunidades vulnerables para satisfacer la necesidad de un techo en la ciudad y discursos hegemónicos como el de la conservación y el urbanismo. Este análisis se lleva a cabo por medio de la articulación de instrumentos conceptuales y metodológicos pertenecientes a diferentes campos de estudio, buscando comprender cómo se interceptan sus ingredientes y proponer posibles vías para su transformación, de manera que el conflicto cumpla con su función social: el cambio social y la emergencia de un nuevo balance en las estructuras de poder.
Después de los acuerdos de paz, y en medio de un contexto de posconflicto, la construcción de una cultura para la paz es uno de los mayores desafíos colectivos que se deben asumir desde los centros educativos para sustentar y orientar las acciones previstas en el posacuerdo. A través de la educación se pueden transformar nuevas formas de sociabilidad, basadas en procesos de justicia y respeto a los derechos humanos, la diversidad cultural y la participación activa de los sujetos que permitan tramitar los conflictos de manera pacífica, asumiendo la corresponsabilidad por una vida digna y colaborativa con los demás. Frente a este nuevo panorama de desafíos y preocupaciones, surge este libro como producto del trabajo colectivo entre docentes investigadores y estudiantes del programa de Maestría en Educación de la Pontificia Universidad Javeriana. En él se proponen programas de formación de docentes y de actores sociales para contribuir a la formulación de políticas públicas y asesorías para la construcción de marcos normativos que propicien la convivencia escolar y la elaboración del material educativo adaptados a los retos del posconflicto.