Uno de los problemas de tipo estructural con más repercusiones de los que afectan a las administraciones públicas españolas a todos los niveles tiene que ver con un sistema de selección del personal que no cumple bien con sus funciones. Esta se realiza por medio de unos procedimientos en ocasiones demasiado rígidos y casi siempre muy desvinculados de las capacidades y competencias realmente necesarias e importantes para desarrollar un buen trabajo al servicio de todos. Además, las estructuras burocrático-administrativas no siempre tienen un diseño de la suficiente calidad como para fomentar desempeños eminentemente profesionales y asegurar que el personal disfrute de las garantías adecuadas para el desarrollo autónomo de sus funciones al margen de los dictados políticos respecto de aquellas cuestiones donde esta interferencia no es deseable. El presente estudio se ocupa específicamente de señalar los problemas e ineficiencias que, a nuestro juicio, se derivan de un modelo de selección del personal de las administraciones que estimamos muy necesario reformar. Por ello, no solo se analizan los defectos del actual sistema, sino que, conservando sus virtudes y examinando los ejemplos de Alemania, Francia, el Reino Unido, Italia, EE. UU. y la Unión Europea, se proponen y razonan toda una serie de modificaciones, tanto sustanciales y estructurales -que vayan a la raíz del modelo-, como otras que podrían ser objeto de una implantación más progresiva, de los sistemas de selección del personal de las administraciones públicas españolas.
Todo el mundo percibe y relaciona la corrupción con valores éticos y morales, pero es menos frecuente que el enfoque sea económico. Un economista consideraría que la corrupción, definida como la consecución de ganancias de manera ilegal o irregular, no altera el producto interior bruto. Se produce una redistribución entre el dinero líquido de los no corruptos al dinero líquido de los corruptos. No habría modificación del producto interior bruto porque no hay generación de actividad económica. Pero otra consideración importante es que entendemos la corrupción como una faceta de un fenómeno más general, el despilfarro; es decir, la falta de eficiencia; y esto sí supone una disminución del PIB o un incremento de los costes operativos para conseguir el mismo PIB. En este sentido, la corrupción induce ineficiencias que tienen costes importantes para el mejor funcionamiento económico. Es decir, la corrupción genera costes económicos, de manera indirecta, a través de su impacto en otras variables económicas. El presente libro presenta una geografía del despilfarro a lo largo del Estado español de la mano de grandes expertos en las diversas áreas que se analizan.
Este libro tiene como objetivo ofrecer una radiografía actualizada de la sociedad valenciana que ayude a comprender los aspectos básicos de su estructura y las dinámicas seguidas durante las últimas décadas. Estructurado en catorce capítulos, aborda cuestiones tan fundamentales como las tendencias demográficas, el modelo territorial, ecológico y económico, la estructura laboral, las desigualdades socioeconómicas, los modelos familiares, las transformaciones en las relaciones de género, la situación de las políticas sociales y educativas, la cultura, los valores, las dinámicas del sistema político, y el estado del sistema judicial en la Comunitat Valenciana. A modo de síntesis, cierran el volumen unas reflexiones sobre autogobierno y Estado de bienestar, que suponen también una llamada de atención acerca de la necesidad de conseguir una mayor implicación ciudadana en la acción política y democrática y un desbordamiento, en definitiva, del actual concepto de ciudadanía.
Con la evaluación de las políticas públicas se pretende discernir en qué medida las actuaciones de las administraciones públicas cumplen con sus objetivos. Sin embargo, evaluar requiere datos, conocimientos y personal especializado, así como redes, instituciones y un cambio cultural que facilite esta tarea. Con la finalidad de estudiar el proceso de institucionalización de la evaluación en la Comunitat Valenciana desde una perspectiva comparada, la primera parte de este libro nos introduce en los conceptos clave y presenta el desarrollo de la institucionalización tanto en España como en Cataluña, la segunda se centra en el uso de la evaluación en los distintos departamentos de la Generalitat Valenciana y se concluye con algunas recomendaciones y sugerencias para promoverla en el futuro.
La mejora de la calidad normativa y su posterior evaluación forman parte de las preocupaciones actuales de nuestro Derecho público. No obstante, hasta fechas muy recientes, principalmente por influencia de modelos anglosajones y, muy particularmente, de la Unión Europea, no se han ido introduciendo medidas en este ámbito, y su desarrollo hasta hoy tampoco ha sido demasiado satisfactorio. El presente estudio analiza los problemas y las ineficiencias del modelo español para la mejora de la calidad normativa y trata de sistematizar una serie de propuestas a través del diseño de un nuevo modelo de producción y evaluación normativa. Para ello, no solo se analiza críticamente el desarrollo legislativo de las medidas de calidad normativa en España, sino que también se realiza un estudio comparado de las medidas adoptadas en relación con esta materia en el Reino Unido, los Estados Unidos de América, Alemania, Francia, Italia o la Unión Europea.