¿Cuáles son y cómo manifiestan su existencia los centros de culto no católicos en una sociedad predominante e históricamente católica como la zacatecana? ¿De qué manera viven esta realidad los ministros de culto? El presente análisis tiene como objetivo efectuar una visibilización de los centros de culto y proponer una tipología de los mismos a partir de: las características arquitectónicas y el tipo de construcción de que se trata en el sentido de determinar si fueron hechos ex professo para ser centros de culto o, si bien, son inmuebles adaptados para tal uso. En segundo lugar, por el Grado de Marginación Urbana (gmu), la zona habitacional y la localidad en la que están situados; en tercer lugar, por el aforo o la cantidad de miembros que pueden albergar en su interior y en cuarto por el grado de visibilización o invisivilización que poseen, es decir, si son edificaciones que se exponen abiertamente a la mirada pública e indican lo que ellas son y lo que en ellas se realiza, o si bien, aunque sean visibles ocultan su identidad como centros religiosos y para lo que son destinados. A la par se exponen otras características complementarias, como el grado de movilidad (o permanencia) y la propensión a la trashumancia de dichos centros a lo largo del espacio urbano, la existencia de logo o letrero en sus fachadas, el tipo de tenencia del inmueble, su conclusión o grado de avance de edificación, los recursos con los que fueron construidos y una breve historia sobre su origen, etc.
El argumento de que el recorte del gasto público impulsa el desarrollo económico ha mostrado ser falaz, al igual que lo es el plantear que las desigualdades sociales se resuelven mediante la dinámica natural de los mercados. Desde que la economía mexicana se abrió a la globalización, las políticas de austeridad no han hecho sino agravar el problema del bajo crecimiento y de la desigualdad en el país. A partir de la adopción del neoliberalismo económico en la década de 1980, el gasto público en México se ha mantenido en niveles de marcada astringencia, especialmente en los rubros de desarrollo social e infraestructura. En condiciones recesivas, el control de la deuda pública mediante una artificiosa contención de la demanda agregada no es un éxito que merezca el reconocimiento público. A partir de sus diversos capítulos, este libro pretende mostrar que los supuestos neoliberales de que un Estado austero fomenta el desarrollo no se cumplen; menos aún en las condiciones post pandemia que afronta el mundo. En lo general, los trabajos presentados en esta obra recurren al planteamiento keynesiano de que la demanda es el factor determinante de la actividad económica. Lejos de ser la austeridad, la política indicada para tiempos recesivos es la franca expansión del gasto público. En palabras de Keynes: «…the boom, not the slump, is the right time for austerity».
Esta obra aborda el tema de la competitividad desde una perspectiva territorial, primero descubre el estado del arte y sistematiza los enfoques y criterios que se emplean en el análisis de la competitividad, principalmente desde la visión del desarrollo territorial. De igual forma, el texto profundiza sobre el enfoque de capital territorial y el papel que cumple en el logro de la competitividad, elemento que explica en buena medida el posicionamiento y desempeño de los territorios en términos de sus activos físicos e intangibles. Luego, tomando como punto de partida la importancia del capital territorial para la competitividad, se abordan sus distintos componentes que expresan las variadas dimensiones de los territorios, a saber: económica, social, cultural, medio ambiente y político-institucional. A continuación, se muestra el capital territorial con el que cuenta la región centro del Estado de Guanajuato, se presenta un desglose de los componentes del capital territorial, con una desegregación de indicadores a escala municipal y se realiza un análisis de éste capital que devela las capacidades diferenciales de dichos componentes y cómo influyen en las condiciones de capital territorial de los municipios estudiados. En suma, la obra permite comprender los factores que inciden en el desempeño de los territorios y sus capacidades competitivas en un mundo globalizado.
Cuando planeábamos el Coloquio anual de la Academia de Ciencias Sociales y Humanidades del Estado de Morelos nos pareció pertinente explorar la situación de riesgo de las sociedades menos favorecidas económicamente; dirimir qué peligros enfrentamos en la segunda década del siglo XXI y alertar sobre la importancia de no abandonar este mirador, de cara a los relevantes desarrollos científicos y tecnológicos que están modificando nuestras formas de vida. Motivadas y motivados por esta orientación, durante la reunión hablamos sobre el impacto del imparable desarrollo de la tecnología de las comunicaciones, de las implicaciones de este en la conformación de las subjetividades; hablamos sobre los riesgos de las Redes sociales, de las fake news y del Internet de las cosas. También abordamos asuntos como los riesgos actuales en la educación superior, en los procesos productivos y en el ámbito del trabajo, y dialogamos sobre la oportunidad que tenemos, a la luz de las discusiones sobre el fin o no de la modernidad, de pensar las modernidades desde otro locus, el latinoamericano. En este libro ofrecemos a los lectores reflexiones, resultado de aquellos trabajos, que pretenden contribuir a la búsqueda de soluciones a la situación de riesgo contante por la que atravesamos -no se diga ahora con la aparición del SARS-Cov-, debida a los excesos de un modelo de desarrollo que promueve un modo de vida con costos muy altos.
Este libro está dirigido fundamentalmente a aquellas personas que por distintas razones se han visto involucradas en procesos de cambio, ya sea como parte de sus labores profesionales, académicas o investigativas. Es una invitación a reflexionar sobre las distintas concepciones de cómo se produce lo social, ya que estas concepciones, sin duda alguna, influyen en las formas de vinculación, así como en las estrategias y prácticas concretas que desplegamos al buscar incidir en las formas y mundos de vida de los actores/as sociales con quienes se interacciona. Para quienes trabajan o estudian los escenarios del cambio social es de suma importancia comprender cómo se produce el entramado complejo en el que interaccionan, qué papel juegan o pueden jugar cada uno de los actores/as, y cómo se constituyen sus redes. El acertijo aquí es que hay una diversidad de propuestas y contrapropuestas sobre qué es y cómo se produce lo social. Cada una de ellas conlleva implicaciones sobre cómo involucrarse, cómo comprender y qué hacer en esos escenarios; ya sea como agentes de cambio, colaboradores/as o como investigador/as.