Galeno se consideraba tanto filósofo y filólogo como médico. Este volumen reúne textos de las dos primeras vertientes, en los que muestra su brillante versatilidad y su honda sabiduría. Galeno –junto con Hipócrates el principal médico de la Antigüedad– nació en Pérgamo en 129-130 d.C., de familia acaudalada. Estudió en Esmirna y Alejandría (anatomía y fisiología). Tras ejercer tres o cuatro años la medicina en la escuela de gladiadores de Esmirna, a partir de 162 se instaló en Roma, donde sería el médico de Marco Aurelio y su hijo Cómodo, entre otras personalidades de la corte imperial. Fue uno de los escritores griegos más prolíficos de su época. Murió en Roma en el año 200. Su influencia en el mundo bizantino, en Oriente y en la Edad Media occidental es enorme, y es sin duda uno de los grandes médicos de la historia. En este volumen se reúnen escritos de Galeno sobre temas diversos, pero que tienen en común no ser obras técnicas de medicina. Hay que recordar que Galeno –que recibió una educación muy esmerada, pues estudió filosofía, arquitectura, astronomía y agricultura– se interesó por una gran variedad de materias, y que se consideraba a sí mismo tanto filósofo y filólogo como médico. «Exhortación a la medicina», «Que el mejor médico es también filósofo» y «Sobre las escuelas de medicina» son obras deontológicas que muestran la concepción que tenía Galeno del médico y la medicina, en absoluto ajenas a los saberes abstractos. "Sobre mis libros, «Sobre el orden de mis libros» y «Sobre el pronóstico» tienen carácter autobiográfico y abundan en acontecimientos y experiencias personales del médico de Pérgamo; además cumplen la función de preparar un registro de las obras auténticas de Galeno, cuya enorme fama había motivado la atribución errónea de multitud de escritos. «Sobre mis propias opiniones» y «Sobre la mejor doctrina» son una muestra de las ideas filosóficas de nuestro autor. Por último, «Sobre los sofismas del lenguaje», refleja el interés de Galeno por la filología, la lógica y su exigencia de una terminología precisa.
Este volumen incluye dos tratados científico-filosóficos del médico más importante de la Roma imperial, en los que fundamenta desde un punto de vista teórico, platónico, su práctica. Galeno –junto con Hipócrates el principal médico de la Antigüedad– nació en Pérgamo en 129-130 d.C., de familia acaudalada. Estudió en Esmirna y Alejandría (anatomía y fisiología). Tras ejercer tres o cuatro años la medicina en la escuela de gladiadores de Esmirna, a partir de 162 se instaló en Roma, donde sería el médico de Marco Aurelio y su hijo Cómodo, entre otras personalidades de la corte imperial. Fue uno de los escritores griegos más prolíficos de su época. Murió en Roma en el año 200. Su influencia en el mundo bizantino, en Oriente y en la Edad Media occidental es enorme, y es sin duda uno de los grandes médicos de la historia. Este volumen incluye dos nuevos tratados del médico más importante de la Roma imperial. Sobre las facultades naturales es una de sus obras fundamentales. En ella, el médico de Pérgamo expone su teoría del carácter unitario del cuerpo animal; cada órgano posee su propia función y ésta es la causa de que el órgano tenga una constitución u otra. Como en todos sus tratados, Galeno lleva a cabo un intento de racionalización y una crítica de las restantes escuelas médicas. En A las facultades del alma siguen los temperamentos del cuerpo Galeno desarrolla una explicación de la relación entre medicina y filosofía y realiza una contundente defensa de su doctrina, influida tanto por Platón como por Hipócrates. Es éste, por tanto, un volumen interesante tanto para filólogos como para filósofos y para los historiadores de la medicina.
Del uso de las partes es el primer tratado completo de anatomía funcional en la historia de la medicina y fue la única obra de referencia en anatomía hasta el Renacimiento. Galeno –junto con Hipócrates el principal médico de la Antigüedad– nació en Pérgamo en 129-130 d.C., de familia acaudalada. Estudió en Esmirna y Alejandría (anatomía y fisiología). Tras ejercer tres o cuatro años la medicina en la escuela de gladiadores de Esmirna, a partir de 162 se instaló en Roma, donde fue el médico de Marco Aurelio y su hijo Cómodo, entre otras personalidades de la corte imperial. Fue uno de los escritores griegos más prolíficos de su época: a sus muy numerosas obras conservadas hay que añadir una cantidad sustancial de escritos perdidos descubiertos en traducción al árabe. Murió en Roma en el año 200. Su influencia en el mundo bizantino, en Oriente y en la Edad Media occidental es enorme, y es sin duda uno de los grandes médicos de la historia. Del uso de las partes, traducida ahora por primera vez al español, es el primer tratado completo de anatomía funcional en la historia de la medicina y fue la única obra de referencia en anatomía hasta el Renacimiento. Influyó decisivamente en médicos como Arnau de Vilanova, Avicena, Vesalio y Miguel Servet. Galeno, «padre de la fisiología experimental», fue partidario de las disecciones para estudiar las partes del cuerpo no accesibles a los ojos. Practicó también vivisecciones para explorar el funcionamiento del corazón o del pulmón. Experimentó con el cerebro, con la médula espinal, con ciertos nervios, sobre todo con el recurrente y con los músculos internos de la laringe. Destaca su descripción de huesos y músculos. Defendió la interdependencia entre la mano y la función cerebral en la dinámica del desarrollo del ser humano. Formuló por primera vez desde un punto de vista no teísta lo que desde sir William Paley se iba a llamar «diseño inteligente»; para Galeno el hombre es la suprema creación de la naturaleza. Afirma que al médico le cumple desvelar la armonía y la perfección del cuerpo interno, que son la salud y la belleza verdadera. Nada más sagrado, dice, que darlo a conocer: por eso considera esta obra de anatomía fisiológica un «discurso sagrado», un himno de alabanza a la naturaleza.
Procedimientos anatómicos describe las distintas partes del cuerpo, así como su función y relación con las demás; fue esencial para sentar las bases, a través de Vesalio y Miguel Servet, entre otros, de la anatomía moderna. Galeno –junto con Hipócrates el principal médico de la Antigüedad– nació en Pérgamo en 129-130 d.C., de familia acaudalada. Estudió en Esmirna y Alejandría (anatomía y fisiología). Tras ejercer tres o cuatro años la medicina en la escuela de gladiadores de Esmirna, a partir de 162 se instaló en Roma, donde sería el médico de Marco Aurelio y su hijo Cómodo, entre otras personalidades de la corte imperial. Fue uno de los escritores griegos más prolíficos de su época: a las muy numerosas obras conservadas hay que añadir una cantidad sustancial de escritos perdidos descubiertos en traducción al árabe. Murió en Roma en el año 200. Su influencia en el mundo bizantino, en Oriente y en la Edad Media occidental es enorme, y es sin duda uno de los grandes médicos de la historia. Galeno mostró, durante toda su vida, un amplio interés por la anatomía. A sus demostraciones públicas asistían, además de médicos y estudiantes, filósofos, políticos y ciudadanos cultos interesados en el conocimiento de su propio cuerpo. Procedimientos anatómicos es una de las obras capitales de Galeno sobre esta disciplina. Escrita tras un largo proceso de investigación que le ocupó durante varios años, describe las distintas partes del cuerpo, así como su forma, función y relación con las demás. La influencia y el prestigio de Galeno fueron enormes en Bizancio, el mundo árabe, la Edad Media y el Renacimiento. Sus prácticas anatómicas sentaron las bases, a través de Von Andernach, Vesalio y Miguel Servet, entre otros, de la anatomía moderna. De los quince libros de Procedimientos anatómicos sólo se han conservado en su lengua original, el griego, los nueve primeros, traducidos íntegramente al español por primera vez en este volumen.
En Sobre la localización de las enfermedades Galeno transmite los resultados de su experiencia: combina problemas médicos con historias clínicas y casos personales, así como la obtención del diagnóstico y el pronóstico, para aconsejar sobre el tratamiento de cada lesión. Galeno –junto con Hipócrates el principal médico de la Antigüedad– nació en Pérgamo en 129-130 d.C., de familia acaudalada. Estudió en Esmirna y Alejandría (anatomía y fisiología). Tras ejercer tres o cuatro años la medicina en la escuela de gladiadores de Esmirna, a partir de 162 se instaló en Roma, donde sería el médico de Marco Aurelio y su hijo Cómodo, entre otras personalidades de la corte imperial. Fue uno de los escritores griegos más prolíficos de su época. Murió en Roma en el año 200. Su influencia en el mundo bizantino, en Oriente y en la Edad Media occidental es enorme, y es sin duda uno de los grandes médicos de la historia. En Sobre la localización de las enfermedades Galeno transmite al lector los resultados de su experiencia médica, mediante el procedimiento de combinar problemas médicos con historias clínicas y casos personales, así como la obtención del diagnóstico y el pronóstico, seguidos de consejos para el tratamiento de cada lesión. La importancia intrínseca de esta obra –huelga referirse a la extrínseca, pues su influencia fue profunda y extensa en espacio y tiempo– radica en su insistencia de identificar dolencias y partes o miembros, anatomía y fisiología, e identificar ambas vertientes: de este modo, atacando a la raíz por separado, es posible entender mucho mejor las causas y el funcionamiento de los procesos. Para alcanzar sus conclusiones, Galeno se basó mucho en las disecciones, que sólo pudo practicar en animales debido a las restricciones que imponía la legislación de su tiempo. Sin embargo, como relata en este tratado, aun a pesar de estas limitaciones, las observaciones le proporcionaron un material empírico insustituible, que combinó con el método científico y la reflexión filosófica.