Esta breve obra de gran calado espiritual ha resistido a los siglos y sigue siendo un apoyo importante para tratar la Pasión de Cristo desde la vida interior personal. Escrita por Tomás Moro poco antes de ser ejecutado, esta obra es un testamento admirable de su autor como humanista y como cristiano. A partir de la contemplación de la Pasión de Cristo, Moro muestra al mundo que el dolor es un ingrediente del amor y la felicidad.
La carta, como el diálogo, fue el género favorito de los humanistas, tanto como medio de discusión o debate o como modo familiar de comunicarse. Se ofrece en este segundo volumen la primera traducción del original latino de una serie de cartas del período más humanista de Moro (1515-1520) y otras posteriores, incluso descubiertas recientemente.
En ellas se aprecia a Moro en su faceta literaria, apologeta, cultural, familiar, etc., pero sobre todo muestran cómo buscó la verdad y cultivó la amistad, defendiendo a sus amigos de actuaciones perversas de terceros y mostrando hacia ellos un afecto y un agradecimiento constantes.