Si bien el vaivén de reformas educativas en México reconoce la precariedad de condiciones en las que se desarrolla la docencia, éstas no han logrado promoverse como directrices efectivas ya que no apuntan a procesos reales de cambio sistémico y en cambio operan más como insignia política. Han sido los actores de la educación aquellos que han logrado identificar determinadas prácticas como un ejemplo a seguir, y es lo que pretende compartirse en este texto. Así mismo, se presentan diversos prontuarios y pautas de trabajo con la intención de que la labor docente logre ser dignificada como valiosa en el proceso de formación.
El bullying, fenómeno escolar por naturaleza, requiere la intervención estructural tanto de los agentes y profesionales dedicados a la planificación y gestión educativas como de aquellos que tienen injerencia directa en las aulas y las problemáticas específicas. Aquí se propone una visión del bullying desde los referentes teóricos que fundamentan los actuales modelos psicoeducativos. Con el fin de enmarcar una intervención congruente, este libro ofrece pautas y recomendaciones de intervención para directivos, docentes, orientadores y tutores desde cuatro niveles: preventivo, desarrollo o proacción, remedial y tratamiento de reincidencias. Todo ello con el fin de lograr una escuela armónica, capaz de advertir, detener y erradicar el acoso y cualquier tipo de agresión y violencia en su interior. Para los autores es clave la articulación de los actores y las acciones, por esto además se incluyen casos que ilustran cómo intervenir desde las perspectivas de cada agente y en los distintos niveles referidos.