Cuando su novio la abandonó, el mundo de Olivia se hizo añicos, y con él su habitual discreción. Un día después, en la fiesta de la empresa, sedujo a su guapísimo jefe.Y desde luego, Lewis no protestó. Su inocente y correcta secretaria se había convertido en una mujer apasionada y atractiva y, pronto, Olivia y él hicieron que su relación traspasase lo meramente profesional…