Elisa escribe teatro y asiste al estreno de una de sus obras en España, invitada por la compañía. El viaje es motivo para recorrer, descansar, recordar. <br><br>A lo largo del relato cambian los lugares geográficos y la cronología se altera. Los hechos pasados, yuxtapuestos y alternando con el presente derivan hacia las historias de personajes periféricos, mínimamente vinculados con Elisa, pero profundamente ligados a su destino.<br><br>Las reflexiones de Elisa sobre el mundo y la vida son permanentes y contribuyen a colorear la trama de alegrías, complicidades y desencuentros en el amor, en los idearios políticos y en el azar de las cosas.<br><br>Nada es lineal y la condición humana obra en el tiempo.