Digna exponente de la literatura didáctica latina, la Astrología de Manilio trata las materias astronómica y astrológica con postulados estoicos, y aborda desde varios ángulos la relación del hombre con los astros. La didáctica tiene eximios practicantes en la literatura latina: Lucrecio y Virgilio, Cicerón, Columela, Avieno… Las Astronomica de Marco Manilio –poeta contemporáneo de Augusto y tal vez de Tiberio– siguen esta línea. En cinco libros, probablemente inacabado, este poema sobre astronomía y astrología data probablemente de alrededor del año 10 d.C. De inspiración estoica –con incidencia en el concepto de «simpatía cósmica»– e influido por La naturaleza de Lucrecio, se divide en las siguientes partes: 1) Astronomía: descripción del Cosmos y conjeturas sobre su origen, de las estrellas, los planetas y los cometas; pasa revista a la doctrina de varios filósofos acerca de estos particulares; 2) signos del Zodíaco y conjunciones entre ellos; 3) modalidades de discernir el horóscopo; 4) signos zodiacales e influjo en los destinos humanos y en los lugares geográficos; 5) influencia de los astros en la elección de oficios y en las costumbres y los caracteres. Estrecha fusión de ambos aspectos, astronómico y astrológico, el poema es riguroso en su didactismo, al tiempo que alcanza momentos de intenso lirismo. Aparte de los aspectos astrológicos, que remiten a antiguos tiempos babilónicos, la obra reviste el interés de reflejar las costumbres y preocupaciones del ciudadano romano, sus profesiones y vida corriente, en la culminación de su Imperio.