La literatura es, ni más ni menos, una casa llena de gente, o al menos lo es para Leila, traductora y escritora frustrada para quien el tiempo se organiza en y para los libros. Sin embargo, su vida es bastante más compleja: ha de enfrentarse a las demandas de lo doméstico y de una madre de lo más exigente, la temible Granny, orgullosa inglesa de nacimiento, pragmática y criticona. Y luego está el castello que da forma a una trama que avanza a través de lo no dicho, el contraste entre los puntos de vista, el humor y el misterio. Prediciendo su propia muerte, Leila lega a su hija Charo sus diarios y una colección de fotografías y películas familiares, y una lista de instrucciones sobre qué hacer con ello. Poco a poco, Charo irá redescubriendo una faceta de su madre, oculta hasta el momento.
CRÍTICAS «En Una casa llena de gente, la autora argentina se sumerge en los espacios privados y comunes de un pequeño edificio y sus habitantes para reconstruir su historia desde distintas miradas.» —Infobae «Uno de los libros más inteligentes, entretenidos y asombrosos del año.» —Infobae «Una de las mejores ficciones publicadas en los últimos tiempos.» —Infobae «La prosa de Mariana Sández es exquisita y elaborada, (…) una sorpresa bella e inteligente, en el marco de la nueva narrativa producida por escritoras argentinas.» —Infobae «Mariana Sández siempre se está riendo con los ojos, con las manos, con lo que dice. Así es su nueva novela. Parece seria, pero es divertidísima.» —Infobae «Es una novela que podrían haber llevado al cine Pietro Germi o Ettore Scola.» —Infobae «Una casa llena de gente es un hermoso homenaje a la lectura.» —Infobae «Una novela exquisita [que aborda la relación con la madre como motor de la escritura.].» —Infobae «Una bellísima historia que abraza la vida y la convierte en arte.» —Infobae «Abre la puerta a un universo desconocido y tan tentador como conmovedora.» —Infobae «Una novela que va tejiendo a través de un concierto de voces una enigmática y atrapante definición del concepto de identidad.» —Agencia Télam «Una simetría perfecta en las frases que encadenan la narración y hacen de la historia un extraordinario retrato familiar.» —Revista Ñ, Clarín