Miguel Angel González Iglesias
La complicada relación material que existe entre la publicidad en general con la propia del ámbito sanitario (en parte, legislación mercantil, pero también en parte, intervenida por razones de salud pública por las administraciones), la complejidad de las acciones judiciales aplicables (legislación procesal) y la tutela de los intereses de los consumidores, también pacientes (sustancialmente, competencia autonómica), genera un panorama normativo que difícilmente ampara un marco claro. Analizar la respuesta del derecho positivo con cierto detenimiento se antoja necesario para el operador jurídico, en aras de ofrecerle una sistematización con la que hacer frente a la amalgama de normas, competencias, aspectos y actores de un mismo problema. La protección de la salud frente al puro interés comercial de productos y servicios que se nos presentan cotidianamente, en la publicidad comercial, con propiedades, indicaciones o cualidades a veces próximas a lo milagroso, ya sea en la vertiente cosmética, nutritiva, o simplemente saludable, es determinante. La presente obra presenta un ánimo clarificador de este sistema complejo, poniendo al alcance del lector una sistemática cierta que ayuda a comprender los mecanismos de regulación de la publicidad, en particular en el ámbito sanitario, desde la doble perspectiva de productos y servicios. Sin olvidar la defensa de los consumidores, que por su caracterización como pacientes, han de ver reforzadas sus garantías. Todo ello desde una visión global a nivel nacional con referencias a otras regulaciones que pueden servir de inspiración para una futura regulación.