Este trabajo indaga por las imágenes de la ciencia en una forma particular de discurso histórico: la novela histórica colombiana. Sus teóricos afirman que una de las principales virtudes de este género es su capacidad de ofrecer perspectivas críticas sobre las narrativas dominantes de la historia social, política y cultural del país. Interesa comprender qué sucede con ese carácter crítico cuando el foco es la ciencia: ¿pone a prueba el género las narrativas dominantes de la historiografía científica colombiana o las refuerza y las amplifica? La respuesta de este libro es que la novela histórica colombiana no suele asumir una postura crítica con tales narrativas cuando su temática es la ciencia, sino que sirve de plataforma para reafirmarlas y propagarlas.
Estas cartas las dirijo a usted, señor X, es decir, a mí mismo, a ese que seré cuando la piel se aje, cuando envejezca, cuando espere en mi lecho la llegada de la muerte y solo desee poder intercambiar mi lugar con alguien más. Se las escribopara recordarle algunas cosas que le gustaban, pero especialmente porque en estos días he pensado mucho en la ignorancia y sé que a usted, que ya se ha convertido en un viejo ignorante, aún deberá emocionarle el tema. Pues habrá olvidado tantas cosas y olvidar no es sino una forma de ignorar. Le escribo para que vuelva a sentir el placer que le produjo pensar en estos asuntos cuando tenía menos años. Para que vuelva a interesarse en la ignorancia, en quién la produce y cómo se produce, cómo se fomenta y cómo se desmantela, a quién beneficia y a quién perjudica. Tantas cosas a las que dedicó días y días de reflexión y ya son apenas una sensación vaga en el cuerpo que se confunde con sus últimos estertores.